Estábamos en mi cuarto mi novia y yo besándonos muy intensamente, ella me estaba tocando mi bulto y ya me había desabrochado el botón del pantalón mientras yo la tenía muy bien agarrada de su culo, hasta que (toc toc) llaman a la puerta de mi pieza, era mi padre el cuál no quería que estemos ahí encerrados, me abrocho el pantalón y voy abrirle, resulta que no quería nada, solo cortar nuestro momento ya que seguramente se escuchaba el ruido de nuestro besuqueo, él era un aguafiestas y siempre nos cortaba ese tipo de momentos, como los dos éramos menores no podíamos ir a ningún lado y en su casa menos íbamos a poder tener intimidad con su madre presente. Pero en la mía tampoco me dejaban, siempre nos cortaban en la mejor parte, así que después de que mi padre entre tuvimos que disimular y dejarlo para otro momento, apenas y si le había tocado por encima de la ropa algunas veces y lo más lejos que llegamos fue cuando en el parque nos fuimos a lo oscuro y me hizo un Pete.
   Después de esa noche mi papá y mi mamá se quedaron hablando, mi mamá me defendía decía que nosotros estábamos en esa edad en la que las hormonas estaban a full, pero papá no quería, decía que eso no era algo que debía hacer ahora, que debía cuidarme y que estaba cansado de todo, hoy por ejemplo llegó cansado de trabajar y él renegar conmigo un hijo que está en la edad de contradecirlo en todo con una esposa que apenas y tiene apetito sexual, esa noche se quedó mirando el techo de la habitación deseando tener otra vida, una en la que no tenga que renegar tanto y pueda coger con más libertades.

   Pero esa misma noche mi novia Aylen también se quedó mirando el techo de su habitación mientras pensaba qué hacer con la calentura que tenía en su cuerpo, con una madre que era muy dura con ella y la vivía regañando, ya no quería ser mujer, deseaba poder tener un control y ser más de lo que era ahora.

   Al otro día mi novia se despierta por el ruido de la alarma, la apaga entre dormida y se levanta para ir al baño, aún dormida no se dió cuenta de nada, hasta que llegó, mientras se lava los dientes mira fijamente al espejo y se da cuenta que ella no era ella, su rostro era distinto, era el de un hombre, era el de mi papá. Se asusta y pega un grito, mi mamá se acerca y le pregunta ¿Estás bien Fabián?
Fabián (Aylen): Ehh si, c-c-cariño estoy bien, sólo me acordé de unos papeles muy importantes que tenía que tener listos para hoy y no los completé.
   Mi mamá se ríe, le da un beso y le dice que lo espera abajo preparandole su desayuno así se va a trabajar, ella se cambia, baja, desayuna y se va al trabajo, hoy iba a ser una jornada larga, ya que ella sabía que trabaja de administrador en una planta, pero no sabía qué hacía exactamente, así que le iba a tocar improvisar.

   Unas horas más tarde suena la alarma de Aylen (ahora Fabián), este la apaga y se levanta sintiendo que había dormido mucho y que estaba muy bien descansado, abre los ojos y ve que su pieza no era su pieza, baja la mirada y ve dos melones asomando de su remera, este pega un grito, bastante agudo y salta de la cama va corriendo la espejo y resulta que no tenía cuerpo de hombre casado con hijos de casi 50 años, tenía el cuerpo de una adolescente de 16, más precisamente de la novia de su hijo adolescente. Este mira angustiado pensando que le había pasado y se dió cuenta que lo último que pidió antes de irse a dormir fue un deseo de ser una persona despreocupada con mucha oportunidad sexual, este cuerpo encajaba a la perfección con su deseo, recorrió toda la casa y se dió cuenta que no había nadie, él sabía que Aylen vivía solo con su mamá, ya que sus padres estaban separados y su papá estaba en otra ciudad, así que recorrió la casa y se dió cuenta que su mamá no estaba, ya debió haberse ido al trabajo, eran las 10 de la mañana, tenía un poco de hambre la verdad, así se preparó algo para comer y tomo el celular de Aylen, ahora suyo, para ver qué tenía que hacer hoy, le llegó un mensaje de su novio, es decir su hijo, preguntándole si iba a la escuela. Le dijo que sí y pues se tenía que ir preparando porque entraba en una hora al instituto, se pegó un baño rápido y salió directo a tomar el colectivo que la acercaba a la escuela.
   Tuvo que viajar parada pues este no tenía asientos libres, en medio del transporte público sintió como un hombre un poco mayor ya se le puso atrás y sin ningún tipo de vergüenza empezó apoyarle su miembro, era la primera vez que la estaban acosando, no supo cómo reaccionar, así que solo se corrió un poco y empezó a mirar a ese hombre con miedo, hasta que un señor muy amable vio esto y le ofreció su lugar, para que no pase incomodidades.
 Al llegar a la escuela pensó que lo mejor iba a ser actuar normal, ya que de todas formas nadie le iba a creer que era un hombre adulto de casi 50 años atrapado en el cuerpo de una joven de 16 mágicamente y por extraña casualidad era la novia de su hijo, no sonaba muy realista. Así que apenas llegó estaba su novio esperándola en la puerta como de costumbre.
Novio: Como estas amor (le da un poco)
   Aylen se quedó quieta, pensante, su hijo la había besado, pero, se supone que esto es algo rutinario, algo normal que hacen todos los días y más si son novios.
Novio: Amor ¿Estás bien?
Aylen: Ehh, sii, solo me puse a pensar si cerré con llave la puerta, creo que si.
   Entraron a un día normal, rutinario en la escuela secundaria, pero para sorpresa de los profesores Aylen se desempeño sumamente bien el día de hoy, era como si ella, no fuera ella, para Fabián esto le era sumamente fácil, matemáticas, química y tecnología eran cosas que necesitaba diariamente en el trabajo y que se le daban muy bien, no sólo fue un alumno ejemplar con el mejor promedio de la secundaria, sino que también era muy bueno en números y tecnología, una persona muy inteligente que sabía quizás más que los propios profesores, así que la secundaria no le resultó ningún problema, aunque Mirko se dió cuenta que algo raro había ya que Aylen no era muy inteligente y de la nada no le estaba costando nada resolver ejercicios complicados, pero no le dió importancia, al contrario la felicitó, Fabián pensó que la cagó y que su hijo estaba sospechando, pero no le dió mucha importancia.
   Después de clases y como era costumbre ya que no había nadie en su casa todavía Aylen se iba a casa de Mirko, su mamá los pasaba a buscar y estos iban a almorzar ahí. Así fue, un día normal y tranquilo, hasta que en medio del almuerzo cayó Fabián (Aylen en el cuerpo del papá) almorzar también, ella no la había pasado tan bien, le resultó bastante complicado el trabajo que este hacía y al contrario de Fabián no pudo adaptarse, el almuerzo fue raro, Mirko y su madre no sospechaban nada pero Fabián y Aylen no se sacaron los ojos de encima, después de comer, Aylen y Mirko subieron a la pieza de este último, pero Fabián la llamó.
Fabián: Aylen, ¿Puedes venir un momento? Necesito hablar con vos.
   Aylen mira a Mirko y le dice que ahí sube con él, estos dos van afuera mientras la madre lava los platos. 
Fabián: Fabián ¿Eres tú?
Aylen: Si, ¿tú eres Aylen verdad?
Fabián: Gracias a Dios, amanecí en este cuerpo y no sé qué hacer, fui al trabajo y no entendí nada.
Aylen: No te preocupes, (le explica todo lo que hace, cómo lo hace y le deja el celular para que cualquier cosa le consulte) dime una cosa, tú vives con tu madre, pero ella no está nunca ¿Verdad?
Fabián: Si, mamá trabaja mucho.
Aylen: Con razón estás tanto tiempo acá, es muy solitaria tu casa, bueno¿Que se supone que tenga que hacer con mi hijo?
Fabián: Yo no lo sé, actuar normal, supongo, ¿Yo que tengo que hacer con tu esposa?
Aylen: ¿Actuar normal?
   Ninguno obtuvo respuesta, ambos volvieron a entrar, Fabián se quedó en la sala mirando una serie con su esposa y Aylen subió a jugar unos videojuegos con su novio. Cómo se costumbre no solo jugaron a los juegos, poco a poco la distancia entre ellos se fue haciendo más y más corta, Mirko la miraba con deseo, sus hermanas estaban volando por todos lados en ese momento, normal en un adolescente, Aylen también estaba sintiendo calor, pero estaba ignorando completamente a Mirko porque sabía lo que iba a pasar y no quería, pero no sé puede evitar lo inevitable.

   Mirko la tomó de la cara y la empezó a besar muy apasionadamente, Fabián trató de resistirse, pero no pudo, Mirko era más fuerte y no solo eso su cuerpo lo traicionó, así que empezó a corresponderle el beso a su hijo, aunque le disgusto no pudo evitarlo, se sentía muy bien, mediante se besaban Mirko fue escalando la situación y empezó a toquetearla como ya era una costumbre para él. Al principio Aylen le agarró la mano pero poco a poco se la fue dejando, no solo el culo le agarró, sino que se lo estrujaba, apretaba y nalgueba, pero conforme la resistencia de Aylen fue bajando Mirko movió la mano a la entrepierna de esta, tocando suavemente por arriba de las bragas y la pollera del uniforme, Aylen estaba caliente y con ganas y si bien no quería en su mente su cuerpo lo pedía a gritos.

Mirko: ¿Puedo?
Aylen: Si, por favor 
   No pudo negarse, su cuerpo la traiciono y antes de decir que no su lengua fue más rápido y dijo que si, Mirko no dudo ni un segundo y le metió la mano adentro de la pollera, fue directo a su vagina.
   En la sala ya se estaba escuchando el ruido, como era costumbre, su esposa como se costumbre le dijo que no intervenga, pero está vez Fabián no se paró, la moto fijamente y la empezó a besar, esto provocó una marea de sensaciones en su esposa, él no le dió importancia a eso, sino que estaba más concentrado en ella.
Fabián: Dime amor, no te apetece jugar nosotros también a lo mismo.
   Le dijo mientras tomaba su mano y la apoyaba en su miembro que poco a poco se iba endureciendo.

   En la habitación la cosa escaló aún más, sin nadie que los detenga o interrumpan Mirko se desabrochó el pantalón y Aylen se puso de rodillas lista para darle sexo oral a su hijo en una práctica que no tenía ni la menor idea de cómo hacer pero que era nueva para todos.

    En cambio en la sala la esposa le estaba dando la mamada de su vida a un pobre Fabián que no sabía lo que le esperaba, este estaba con los ojos atrás de la nuca deleitando como una señora ya mayorcita le muestra lo que se supone hizo por más de 30 años, le estaban dando su primera mamada y resulta que era la cosa más satisfactoria que había experimentado en su vida.

   De vuelta en la pieza y con las hormonas a full, la mamada que le dió su padre en el cuerpo de su novia no fue para nada buena, de hecho se le puede catalogar como muy mala, pero eso no le importo a un Mirko que no necesito de mucho para explotar una gran carga de semen directo a la cara de su novia.
   Le pasó unos pañuelos y le limpió la cara que derramaba semen por todos lados, Aylen estaba asqueada y muy disgustada, esto era raro, tenía semen en el rostro y le había dado una mamada a su hijo, pero por otra parte estaba completamente caliente y extasiada, necesitaba de más, si cuerpo lo pedía, las hormonas le gritaban que tuviera sexo.

   Eso hicieron, sin nadie que interrumpa se acostó en la cama, abrió las piernas y le dió entrada a Mirko, el cuál no necesito ni de un descanso que vió como su novia se desvestía y ya estaba listo y duro para seguir jugando, de a poco empezó a introducir su miembro, el cuál le causó un gran dolor ya que Aylen era virgen, está era la primera vez que habían llegado tan lejos, en su pieza un miércoles a las 3:16 de la tarde estaban haciendo lo que no pudieron hacer nunca, muy lentamente la metió hasta el fondo de su vagina, para sacarla despacio hasta que salga casi toda y volverla a meter hasta el fondo despacito, cada metida tardó aproximadamente 3 segundos, fue muy lento, pero eso hizo que Aylen prácticamente no se queje del dolor, aunque si haya suspirado y apretado los dientes varias veces mientras le pedía despacito que no sea bruto.

   En la sala las cosas eran distintas, si bien estaban en silencio los dos para no hacer ruido la cosa no iba nada lento, al contrario era extremadamente rápido, en un segundo había entre 3 y 4  metidas de verga, los esposos estaban en pleno apogeo disfrutando del mejor sexo salvaje que se puede tener de forma silenciosa.

   Mientras que en el cuarto ya empezaron a aumentar un poco la velocidad y a coger de verdad, si bien le seguía incomodando no era dolor, solo un poco de molestia, en cambio Mirko estaba experimentando tocar el cielo con las manos, en este momento se podía morir que era completamente feliz, pero Aylen la cual estaba gimiendo con la mano en la boca lo más despacio posible se preguntaba si esto estaba bien, no podía dejar de sentirse una puta, pero realmente no pudo evitarlo, ya no estaba viendo a los ojos de su hijo, sino que estaba mirando a su novio, uno que le estaba metiendo la verga y le estaba gustando.
   Siguieron cogiendo, aunque no por mucho ya que debido a la inexperiencia de Mirko este no duró demasiado, pero la saco de la vagina de su novia antes de correrse y le echo la segunda carga en su abdomen, mientras los dos quedaban bastantes cansados, se limpiaron como pudieron, se cambiaron y bajaron a tomar agua porque estaban realmente sedimentos.

   Ahí abajo estaba su madre y su padre, los dos con una gran sonrisa en la cara mirándolos, mientras Aylen bajaba muy despeinada y rengueando y Mirko estaba rojo, con unos chupones en el cuello y con una sonrisa estúpida de haber pasado el mejor rato de su vida.
   Su madre lo mira, se lleva la mano cerrada a la boca, tose y le señala su bragueta con ojos, Mirko se da cuenta y la levanta en lo que parece que iba hacer una escena que se iba a repetir constantemente todos los días de ahora en más. Fin.