Entregada felizmente por mi marido

Hola amig@s poringuer@s, para los que leyeron nuestro relatode exhibicionismo en la gasolinera, pues ya veníamos pensando en hacer algo más,y se dio el fin de semana pasado, como mi esposo tenia la fantasía de verme conotro hombre pues después de tanto insistir de la cumplí, aunque debo decir queel ya tenia al candidato, un conocido llamado Carlos con el que había estadoplaticando a mis espaldas, sabiéndose seguro de que me iba a convencer, él eraun poco más alto que mi esposo y de muy buen ver, algo guapo y con unapersonalidad seductora.
Salimos a tomar algo una noche para ver cómo era la reacciónentre su amigo y yo y la verdad es que todo se llevo muy ameno y de la mejormanera, esa noche bailamos un poco, donde pudimos tocarnos mutuamente generandouna excitación muy rica, lo cual le comenté a mi esposo y encantado nos fuimosa casa, durante el camino mi esposo fue manejando mientras nosotros íbamos detráscomo novios dando besos y manoseos.
Al llegar a casa yo fui a prepararme a la habitación, poniéndomeuna lencería roja que mi marido había comprado especialmente para la ocasión.Me aliste en lo que ellos tomaban un tequila y al verme salir voltearon a vermealagándome con piropos y silbidos, mi esposo tomo asiento en un sillón diciéndonosque el solo sería espectador de lo que seguiría a continuación.
Carlos se acercó a mi tomándome de la cintura y empezando abesarme el cuello bajando por mis hombros mientras empezaba a besar la parteexpuesta de mis senos y bajando una mano a mis nalgas mientras las apretaba ydaba suaves nalgadas, yo lo abrace del cuello entregándome por completo, para despuésdesabotonarle la camisa y el pantalón empezando a acariciarlo también queriendodescubrir que había debajo de la ropa, a lo cual con su ayuda pudo sacar supene, que era un poco mas grande que la de mi esposo, mas o menos unos 19 cm. ytambién más gruesa.
 Empecé a masturbarlo conmi mano subiendo y bajando mi mano a lo largo de su rico pene notando como se poníaaún más duro apretándolo un poco y acercándolo hacia mi conchita que empezaba aescurrir y mojar la tanga que traía, Carlos estaba tan excitado como yo, que poniéndomela mano en la nuca hizo un poco de presión, sabiendo yo que el quería lo mismoque yo, por lo que sobre la cama me hinque para poder saborear después de muchotiempo otra verga que no fuera la de mi esposo, por lo que decidí hacerlo lomas rico que se pudiera.

Entregada felizmente por mi marido



Puse mi culo apuntando a mi marido, que ya estaba masturbándoseen el sillón mirando la escena, primero pase mi lengua sobre la cabeza hinchadade su pene como si fuera una paleta, para después empezar a recorrerlo con lalengua hasta llegar a sus testículos, regresando a la cabeza y por fin metiéndolaen mi boca, dejando escurrir mi saliva para que el sintiera el calor de mi bocaen la cabeza del pene, escurriendo mi saliva por el largo de su pene y haciendocírculos con mi lengua en su cabeza hinchada haciéndolo gemir y que por la excitaciónpusiera sus manos en mi cabeza jalándome para que entrara su pene por completoen mi boca, lo cual me costó un poco provocándome arcadas pero que esforzándomeun poco logre meterlo por completo sin molestas y el en ese punto empezó acogerme la boca, sintiendo como salía y entraba su rico pene en mi boca.


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Yo igual ya estaba muy excitada y quería recibir placer tambiénpor lo que me levante un poco empujándolo de espaldas para que el quedaraacostado en la cama y yo subiéndome sobre el, sacando mis tetas para ofrecérselasy que me las empezara a mamar y morder, lo que provoco que empezara a salirleche de mis tetas y el muy gustoso empezó a saborearla y tomársela, yo tome supene con mi mano colocándolo en la entrada de mi conchita y empecé a bajar pocoa poco, sintiendo como se abría mi conchita mas que lo de costumbre, notandocomo el borde de la cabeza de su pene me tocaba por dentro de mi mojadaconchita la cual lo apretaba por estar mas gruesa, era una sensación deliciosay lo cual provoco unos gemidos incontrolables, en realidad era riquísimo sentircomo entraba mas adentro y me tocaba todo alrededor por dentro, lo cual tambiénel sintió muy rico comentándome que lo apretaba delicioso.

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Después de estar un rato así, Carlos me pidió voltearnos yquedar de misionero, acostándome ahora yo y abriendo mis piernas, dándole elcontrol de la acción a el y procediendo a dejarme llevar por completo, el empezóa penetrarme y aumentar el ritmo cada vez, sacaba su pene por completo y lo volvíaa meter hasta los huevos, era una sensación riquísima porque hacia lo mismopero cada vez mas rápido, el borde de su cabeza era lo mejor de todo tocándome pordentro por completo, tenia los ojos cerrados y un momento que los abrí vi ahí ami esposo el cual estaba disfrutando de igual manera todo esto, preguntándole yoque como quería que terminara Carlos, comentándome que en cuatro.

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Siguiendo la petición de mi amado esposo, procedimos asepararnos y Carlos encantado por cumplir la petición de mi esposito me siguióa la mesa que estaba al lado del sillón donde estaba el para darle el mejor espectáculo,me apoyé en la mesita y me puse de puntitas ofreciéndoselo a Carlos quien nitardo ni perezoso se acercó con su rica verga para seguir dándome placer.

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Y yo mas que encantada paraba el culo empezándolo a mover encírculos lo cual pareció encantarle a Carlos que empezó a gemir anunciándonosque estaba por correrse, yo me encontraba en el mismo punto, comentándole quelo hiciera dentro, por lo que el me tomo de las tetas pegándome a él apretándomey exprimiéndome la leche, aprovechando yo para moverme en circulo sintiendocomo estaba lo más adentro posible de mi conchita y con mi movimiento como metocaba todo por dentro sintiendo como se hinchaba su verga empezando adescargarse dentro de mí y mi marido igual descargándose a un lado nuestro.

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Fue algo riquísimo que esperamos repetir muy pronto, espero les haya gustado, dejen sus puntos y comentarios.

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