El cumpleaños de Jeison estaba cerca, su madre estaba preocupada porque realmente ahora no habĂa preparado nada en especial para su hijo, hace tiempo que estaban algo distanciados, pero esperaba poder pasar tiempo juntos ahora que serĂa su cumpleaños.
Mientras estaba buscando que comprarle de regalo, la mujer tambiĂ©n estaba buscando un pastelito y una vela para acompañarlo, ya no era comĂşn que hicieran fiestas de cumpleaños ni cosas asĂ, pues Jeison ya era un chico casi adulto y pensarĂa que  serĂa algo vergonzoso para Ă©l, celebrarle una fiesta de cumpleaños, asĂ que solamente decidiĂł comprarle una velita y un pastel junto con su regalo, desafortunadamente, la pobre mujer no encontraba un buen regalo para su hijo, esta vez realmente querĂa impresionarlo y con una simple playera no lo harĂa.
La mujer camino por todos lados sin encontrar nada, hasta que de repente, noto que en un extraño callejo parecĂa haber una pequeña tienda iluminada, la mujer caminĂł temerosamente hacia el lugar, ya que el letrero decĂa algo como.
“ el rey de la magia”
El nombre perfecto para una tienda a la que acudirĂas en busca del regalo perfecto para un hijo al que le gusta el tema de la magia, la mujer no lo pensĂł dos veces y entro mirando muchos objetos mágicos eh incluso criaturas extrañas que parecĂan especies no descubiertas.Â
- ¡Hola en que puedo ayudarte humana! -una agradable ancianita la sorprendĂa –
- ¡Ay, ah, hola perdón no la vi! -la mujer le contesto –
- ¡No se preocupe!, ÂżQuĂ© se le ofrece?, ÂżQuĂ© tipo de regalo quiere para su hijo?, ÂżJoyas extrañas, hechizos mágicos, brujerĂa, amarres de amor, la novia perfecta para su hijo, un cuerpo joven para usted, quiere ser la novia de su hijo acaso? -la mujer comenzĂł a hacerle muchas preguntas extrañas y algo acertadas –
- ¿Qué, pero como, porque dice eso, acaso lee la mente? –
- ¡JAJAJAJA, hay mi niña, hay muchas cosas de mà que aún no sabes! –
La mujer comenzĂł a emanar un aura verde y de repente, su cuerpo comenzĂł a transformarse en una copia de la mujer.
- ¿Qué demonios, como hizo eso?, ¡Es una bruja o algo parecido! –
- ¡Calma niña, calma! –
Entonces la mujer regresaba a su forma original, pero luciendo completamente joven.
- ¡Si, soy una bruja!, desde hace muchos miles o millones de años que lo soy, hago todo tipo de cosas, hechizos, maldiciones, soy tan sabia como cualquier Einstein o Aristóteles, tan vieja o más vieja que Chabelo y la Reina Isabel eh incluso Maribel –
- ¡Jajaja! –la mujer reĂa –
- ¡Yo se muchas cosas y puedo ser tu amiga o tu enemiga!, depende de las intenciones que tengas -
- ¡Bueno, pues yo realmente buscaba un regalo para mi hijo! –
- ¡Si, lo se!, por eso es que preguntĂ© quĂ© tipo de regalo querĂas –
- ¡Bueno yo!, realmente no lo sĂ©, ambos hemos estado algo distanciados y lo que me gustarĂa es que estemos más unidos, tambiĂ©n darle algo que verdaderamente lo sorprenda –
- ¡Bien, veamos!, tengo pociones, hechizos, podrĂa darte un medallĂłn mágico o esta Swap Note, pero siempre desaparecen de sus dueños una vez usadas ¡Jajaja! –
- ¿Swap Note? –
- ¡Ah, es solo un libro viejo!, bueno veamos, algo que necesites, como un deseo, ya sĂ©, es su cumpleaños, podrĂas regalarle esta velita de los deseos, obviamente cumple solamente un deseo por ser su cumpleaños, ni que fuera la lampara de Aladino o Shenlong –
- ¿Cómo asà velita de los deseos? –
- ¡Si niña si, cuando sople la velita y pida su deseo se cumplirá –
- ¡Ah bueno, de ser asà yo quiero mil jajaja! –
- ¡No tonta!, no es asà de fácil, además cuesta mucho, y no tienes más que para una en este momento –
- ¡Bueno!, entonces ahora mismo te la compro y pediré ser millonaria para darle todo lo que quiera a mi hijo –
- ¡Para pendeja no se estudia! –
- ¿Cómo? –
- ¡Nada, nada!, mira, no sirve si no es tu cumpleaños, la magia es poderosa y la arruinarĂas, solamente dura 24 horas de aquĂ a que la uses, asĂ que no podrĂas esperar tanto para pedir un deseo, mañana es el cumpleaños de tu hijo asĂ que servirá a menos que la desperdicie y no la use –
- ¡Esta bien, está bien!, pues me la llevo –
- ¡Bien! y como estamos en Perú, son Mil soles –
- ¡Tanto! –
-Por eso te decĂa que no traĂas más que para uno –
- ¡Umm ratera esta! –
- ¿Cómo? –
- ¡Nada…, nada! –
- ¡Puedo arrancarte el alma, darle tu cuerpo a un pervertido y comerme a tu hijo! –
- ¡Nooo, Nooo, lo siento señora bruja lo siento! –
- ¡Llámame Kata niña, Kata! –
- ¡Esta bien señora Kata! –
- ¡Bien, ahora ve a casa con tu velita! –
- ¡Pero no le eh pagado todavĂa…!, ya agarro mi dinero verdad? -_-Â
- ¡SĂ! –
- ¡Adiós y gracias, pero no vuelva a copiar mi cuerpo…! –
- ¡Ni si quiera lo pensé! –
La mama de Jeison regresaba a casa, estaba algo preocupada y ansiosa, pero querĂa realmente sorprender a su hijo, ahora estaba más emocionada que nunca, que serĂa lo que su hijo desearĂa, ojalá pudiera creerle, pero serĂa mejor que fuera una sorpresa.
Al siguiente dĂa, la mujer entro al cuarto de Jeison sorprendiĂ©ndolo.
- ¡Estas son las mañanitas que cantaba el rey David…! –
- ¡Mamá! –
- ¡Felicidades hijo! –
- ¡Gracias mama, te quiero!, pero no tenĂas que molestarte, ya sabes que no me gustan del todo las celebraciones –
- ¡Lo sĂ© hijo!, pero es que hemos estado algo distanciados y solamente querĂa acercarme un poco a ti –
- ¡Esta bien mama! –
- ¡Sopla tu velita y pide un deseo, verás que se hará realidad, lo prometo! –
- ¡Uy si, como no! –
Jeison mira la velita en el pequeño pastelito que le habĂa dado su madre, entonces miro ansioso por no saber que pedir, la velita estaba casi a punto de consumirse, asĂ como su magia y tenĂa que actuar rápido.
Luego de uso segundos, su madre miro como Jeison soplaba la velita justo a tiempo, la mujer se quedĂł en shock, esperando ver mucho dinero apareciendo de la nada o algo por el estilo, pero no sucedĂa nada.
- ¡Bueno, era de esperarse! -Jeison decĂa algo triste –
- ¡PerdĂłn hijo!, te juro que la señora que me habĂa vendido esta velita me dijo que… -
- ¡Ahhhhhh me dueleeee! –
- ¿Qué te pasa hijo, que tienes? –
Jeison comenzĂł a tocar su vientre muy adolorido, cayĂł al suelo girando en cĂrculos y de repente todo su cuerpo y a su alrededor comenzĂł a cambiar.
- ¡Pero qué hiciste Jeison! –
- ¡Mas bien que hiciste tú, me duele mucho! –
- ¡Pues que pediste de deseo! –
- ¡No se!, además no puedo decirte, sino no se cumplirá, aunque ya no se si quiero que se cumpla –
Jeison estaba en mal estado, sentĂa como todo su cuerpo le quemaba y le dolĂa, mientras que su madre estaba abrazándolo muy preocupada, mirando como todo a su alrededor cambiaba, los muebles, las paredes, la pintura, las cosas, todo, por un lado, la mujer pensĂł que habrĂa pedido ser millonarios, por lo que todo estaba cambiando para bien, pero tambiĂ©n estaba preocupada de que, para suceder, Jeison tuviera que sufrir, cosa que la bruja no le habĂa dicho.
- ¡Ahhhhhh! –
- ¡Hijo que tienes! –
Todo alrededor habĂa terminado de cambiar, de repente, la mujer admiro como el cuarto que era de su hijo parecĂa haber cambiado ahora a ser un cuarto de chica muy precioso, era más amplio y fino, aunque Ă©l seguĂa en mal estado, pero entonces Jeison comenzĂł a gritar más desesperadamente.
- ¡Mama, me dueleeee! –
La mujer trataba de entender que le pasaba su hijo cuando de repente este terminĂł inconsciente, la mujer sentĂa un golpe al corazĂłn pensando que habĂa muerto, pero de la nada, admiro como el cuerpo de su hijo comenzĂł a cambiar.
Su cabello comenzĂł a crecer, hasta hacerse más rizado y castaño, su piel se volviĂł clara  y más lisa, dejando todo el bello y sus antiguos rasgos atrás, su rostro se transformĂł en el de una bella chica, la mujer miraba y no lo podĂa creer mientras que veĂa como más cambios le  sucedĂan al  cuerpo de  su hijo, de repente, un par de senos  comenzaron a  crecerle, su cintura se redujo y sus caderas se ampliaron, dejando unas largas piernas muy lindas teniendo en medio de ellas una nueva vagina que habĂa surgido junto con todos los demás cambios.
La mujer estaba impresionada, no pensaba que su hijo deseara ser una mujer, eso no estaba en los planes, pero tenĂa que saber porque habĂa deseado tal cosa, su ropa tambiĂ©n habĂa cambiado dejando a lado su ropa de hombre por ropa femenina acorde a su cuerpo, entonces, la mujer arrullo a su nueva hija cuidándola hasta que despertara.
Mientras tanto, observo todo lo que le habĂa pasado a la casa, volviĂ©ndose una mejorada casa con todo lo que pudieran pensar, no llegando a una mansiĂłn, pero si una casa de gran nivel, al parecer, habĂa un par de carros afuera acompañando la casa, una mucama y un mayordomo esperando.
- ¡No puede ser!, no puedo creer que mi hijo haya deseado ser una niña rica –
Su madre admiraba todo realmente asombrada de que al menos pudiera desear algo para mejorar sus vidas, aunque no sabĂa en que podrĂa mejorar su vida siendo una mujercita.Â
- ¡Jessica hija, por fin despertaste! -su madre le decĂa ahora llamándola por su nuevo nombre de chica –
- ¡Mama, porque me dices Jessica! -la nueva Jessica le decĂa escuchando como sonaba su voz bastante femenina –¿QuĂ© le paso a mi voz, porque hablo asĂ? –
- ¡Jessica tú! –
- ¡Pero que son estas cosas!, ¿Qué le paso a todo mi cuerpo, porque todo es tan diferente?, ¿Dónde están los muebles, donde están mis cosas? –
- ¡Hija tú…, te convertiste en una señorita! –
- ¿Qué, como mierda paso esto? –
Jessica corrĂa al baño sintiendo como todo se en su cuerpo se movĂa tan diferente.
- ¡No puede ser, de verdad me convertà en una mujer! –
Jessica admiraba su reflejo en el espejo, nunca habĂa visto a una chica tan bonita frente a Ă©l, parecĂa un ángel, estaba realmente bonita, sus ojos tan preciosos, su cabello, su rostro, pero entonces, tambiĂ©n tenĂa tetas en el pecho y lo peor, su vejiga comenzĂł a reventar, necesitaba orinar.
- ¡Mamaaaaaaaaa, tengo una vaginaaaaaaaaa! –
Jessica gritaba desesperada al mirar que ahora tenĂa una vagina en lugar de su pene.
- ¡Hija, pues no sé qué decirte! –
- ¿Cómo orinas con esta cosa entre las piernas? –
- ¡Pues como una mujercita! –
- ¡Mamaaaaaaaaa! –
- ¡Bueno, bueno, ya!, solo tienes que relajarte, abre un poco tus piernas y tranquilamente saldrá –
- ¿As� –
Jessica trataba de hacer lo que su madre le decĂa, estaba muy nerviosa, no entendĂ aporque ahora era una chica y todo habĂa cambiado, mientras terminaba de hacer sus necesidades, Jessica notaba sus tetas, eran algo graciosas y bastante suavecitas, de repente comenzĂł a manosearlas y apenada, miro a su madre con vergĂĽenza.
- ¡Esta bien hija!, es normal, es algo que ahora es parte de tu cuerpo, es normal que quieras tocarlas –
- ¡Pero mama!, ¿Por qué me convertà en una niña? –
- ¡Pues que fue lo que deseaste! –
- ¡No sé, yo solo!, desee tener todo lo que un hombre quiere! –
- ¡Exactamente cómo! –
- ¡No sé, no se!, pensé en tener dinero y a una mujer muy sexy a la que pudiera tocar con mis propias manos… –
- ¡Jessica simplemente mĂrate ahora mismo!, estas tocándote con tus propias manos –
- ¡Ahhhhhh, no puede ser, es verdad! –
Jessica alejo sus manos de sus suavecitas tetas, cerro sus piernas repentinamente, muy nerviosa, mientras que su orina aun salĂa de su vagina, empapando todo de orina, realmente orinar de esa manera la habĂa puesto muy nerviosa.
- ¡Jessica! –
- ¡Mama! –
La mujer trataba de ayudar a su pequeña hija a limpiarse.
- ¡Tranquila Jess!, mira, las mujercitas nos limpiamos asà –
La mujer tomaba un poco de papel higiĂ©nico y lo pasaba por sus piernas, frotando suavemente desde atrás hacia delante, mientras que Jessica sentĂa como su mama tocaba su vaginita y eso comenzĂł a excitarla.
- ¡Ahhh! -Jessica soto un leve jadeo –¡Mama! –soltó un grito, algo nerviosa al escucharse –
- ¡Jeje, tranquila mi princesa!, es normal, es una parte muy sensible –
- ¡Mama, no me digas mi princesa!, yo soy un hombre no una niña –
- ¡Pues ahora eres una niña y eres mi princesa! –
- ¡Mamaaaaaaaaa! –
Terminaron de hacer sus cosas en el baño y regresaron a su habitaciĂłn, Jessica comenzĂł a notar que todo era nuevo y diferente, su ropa de chico ahora era de chica y al parecer era una ropa muy fina y cara, ropita digna para una chica de un cuerpo tan sexy y fino como el suyo, Jessica se sentĂa algo avergonzada, además todo en su cuarto era bastante femenino.
-No se porque interpreto asà tu deseo Jessica, pero no solo tu cuerpo cambio, si no toda la casa también, al parecer, ¡Ahora somos ricas! –
- ¡Pues supongo que fue por desearlo asĂ!, además, yo que me iba a imaginar que realmente se concederĂa –
- ¡Pues si verdad, que cosas jeje…! –
- ÂżPor quĂ© dices eso?, ¡Es verdad, tu querĂas con mucho Ămpetu que pidiera mi deseo!, ÂżQuĂ© sabes acerca de esta cosa? –
Jessica tomaba la velita aun derretida en su pastel ya añejado, tratando de examinarla, pero no lograba entender que contenĂa.
- ¿Esta drogada o algo as� –
- ¡No, no, es que no me lo vas a creer hija! –
- ¡Mama, soy una puta niña…!, ay no, eso se escuchó bastante mal, soy una chica, como mierda no te voy a creer –
- ¡Bueno hija yo, veras…! -
La madre de Jessica le conto todo acerca del dĂa anterior cuando se encontrĂł con aquella tienda de magia y hechicerĂa, acerca de la bruja y todo lo que habĂa pasado.
- ¡No puede ser!, me encantan las cosas mágicas, pero no terminar siendo una chica –
- ¡Lo se hija, pues tú que deseas cosas que no! –
- ¡Mamá! –
- ¡Bueno!, tendremos que ver cĂłmo nos adaptamos a esta situaciĂłn, pero no te preocupes, yo te ayudare en todo, hija mĂa –
- ¡Mama, tenemos que ir a ver a esa bruja, yo no me puedo quedar asĂ! –
La mujer inclinaba la cabeza, tampoco querĂa que su ahora hija sufriera, pero por otro lado lo estaba disfrutando, sentĂa que de esta manera podrĂa acercarse más a su ahora hija.
Luego de pensarlo, ambas acodaron salir mañana a buscar a la bruja y su tienda, mientras tanto, madre eh hija comenzaron a estudiar su cuerpo femenino y toda la grandiosa casa, al parecer ahora tanto ella como su mama tenĂan mucho dinero en el banco, tenĂan propiedades, además de la casa, una empresa y demás, realmente Jessica tenĂa todo lo que un hombre querĂa, pero Ă©l no querĂa ser una mujer el resto de su vida, ÂżO sĂ?
Jessica se sentĂa algo incomoda por tener el cuerpo de una mujer, al principio le gusto la suavidad y lo rico que sentĂa al tocar sus nuevos senos y como su madre habĂa frotado su vaginita, pero no era que quisiera quedarse asĂ para siempre, además, tuvo que practicar mucho con su madre, pasaron el resto del dĂa maquilándose y caminando con zapatillas además de tener que aprender a comportarse como señorita, a cerrar sus piernas, a hablar en pĂşblico, no caer fácilmente en la labia de un hombre que quisiera abusar de ella etc.
Jessica terminĂł bastante abrumada, no querĂa termina siendo abusada por un hombre, estos tiempos estaban muy violentos como para ser una mujer, mayor razĂłn para visitar a esa bruja y lo devolverá a ser hombre, pero lo que más temor le dio, es cuando su madre le explico lo que le pasarĂa cuando le llegara el periodo, siendo aĂşn más traumatizante que lo anterior.
Jessica estaba bastante sorprendida de lo que tenĂa que vivir si se quedara como una mujer el resto de su vida, no imaginaba tener que soportar el periodo, tener que ser acosada por los hombres y muchas más cosas de mujercita, pero sobre todo, se negaba a toda costa a terminar en la cama como un hombre, luego de que  su madre se fuera a dormir, Jessica recordĂł que aĂşn no habĂa visto sus redes sociales, tomo su nuevo IPhone 12 pro, mismo que desbloqueo  con su huella digital, revisando que le habĂan llegado muchos mensajes de personas que ni siquiera concia, todos deseándole un feliz cumpleaños, al parecer ahora para variar era una chica bastante popular, tenĂa un perfil de Instagram con muchos seguidores y amigos en su perfil de Facebook, tambiĂ©n tenĂa una cuenta de tik tok, eh incluso videos y fotos de ella misma como si hubiera sido ella misma todo este tiempo, actuando como chica y cosas del estilo.
Afortunadme, parecĂa que no tenĂa novio, solamente varios amigos con los que hablaba y parecĂa que coqueteaba, sin darse cuenta, Jessica terminĂł respondiendo algunos de los mensajes de los chicos, comenzando a verlos lindos y atractivos, su sonrisa lo decĂa todo al responder, cada mensaje que respondĂa, era una rosa que le caĂa, desconociendo lo que estaba sucediendo en su mente y lo que provocaba al sentir en todo su cuerpo.
Finalmente, se tomĂł un par de fotitos respondiendo generalmente a todos por sus felicitaciones y regreso a la cama para descansar luego del tan alocado dĂa.
Al dĂa siguiente, Jessica y su madre retomaban sus actividades femeninas, Jessica comenzĂł a lidiar por su cuenta al tratar su cuerpo femenino, recordando todo lo que habĂa practicado con su madre, vistiĂ©ndose bastante femenina, actuando realmente como una chica eh incluso parecĂa ya haberse adaptado muy bien a serlo, su madre estaba sorprendida el cambio de Jessica de un dĂa a otro, mientras que desayunaban y terminaban para alistarse en la bĂşsqueda de la bruja.
Jessica tomĂł su nuevo auto y condujo junto a su madre al lugar donde habĂa encontrado a la bruja, pero luego de buscar y de buscar, jamás encontraron el lugar donde habĂa estado la bruja, parecĂa que se la habĂa tragado la tierra, (realmente habĂa ido a otro sitio a una nueva aventura).
Jessica y su madre estaban desesperadas, aunque por dentro ambas deseaban que sus nuevas vidas continuaran.
- ¡Yo no quiero seguir asà mama!, pero sà de este hermoso cuerpo depende de que tengamos nuestra nueva y grandiosa vida, tomare el sacrificio de quedarme asà por siempre –
- ¡Ay hija!, perdĂłname en verdad, yo no querĂa que las cosas terminaran asà –
- ¡No mama!, no tienes la culpa de nada, este ha sido el mejor regalo que hayas podido darme, sabes…, me encanta mi nueva vida –
Su madre la miraba impresionada, realmente veĂa un gran cambio en su nueva hija, se sintiĂł bastante feliz y ambas regresaron a su grandiosa nueva vida.
Los  dĂas pasaron y la nueva Jessica estaba completamente feliz con su cuerpo y su vida de chica, le encantaba tener la atenciĂłn de  todo el mundo, por su grandioso cuerpo y su fama, recordaba como antes estaba sufriendo porque podrĂa  terminar con su novia, cosa que lo tenĂa asĂ de deprimido, pero luego del regalo de su madre, todo cambio, comenzĂł a  sentirse más viva, más feliz y deseada, mirando como todos  sus seguidores aclamaban por ella, pero además, le encantaba tener  ese  grandioso par de tetas, poder estrujarlas y disfrutar de ellas en todo momento, Jesica no podĂa creer que luego de  odiar verse como una mujercita ahora era  toda  una verdadera putita.
Se tomaba fotos atrevidas, eh incluso abriĂł una cuenta de OnlyFans, donde vendĂa fotitos de su cuerpo, para llamar la atenciĂłn y ganar cada vez más dinero, lo cual la hacĂa feliz, sobre todo por tener la atenciĂłn de muchos hombres que la acosaban y la hacĂan sentir una verdadera mujer.
Su madre estaba muy feliz tambiĂ©n de tener a su nueva hija, ahora eran más unidas y platicaban mucho acerca de cosas de mujercitas, salĂan de compras a los centros comerciales más caros y finos de la ciudad además de comer en lugares de alto prestigio, su vida habĂa mejorado para mucho, pero lo que más le impresionaba a su madre, era ver como Jessica se habĂa adaptado bastante a las cosas de chica, si bien, su primera vez con su periodo fue un desastre, pero con el tiempo, la nueva Jessica se fue adaptando a eso y mucho más, tambiĂ©n le sorprendĂa lo bien que hablaban acerca de hombres, de cĂłmo estos lucĂan atractivos y de cĂłmo deseaba poder tener a uno de ellos como novio.
Luego de un tiempo, Jessica habĂa conocido a un seguidor de su red social, la habĂa invitado a pasar el dĂa y Jessica no se negĂł, obviamente primero se aseguraron de que el tipo fuera real y no fuera un delincuente, Jessica habĂa pasado el mejor dĂa de su vida a su lado, pues luego de pasear por toda la ciudad y de pasar un dĂa agradable, sucediĂł lo que Jessica tanto anhelaba, poder convertirse en una mujercita de verdad.
Y es que Jessica no se quedó sin ese gran premio, acepto rápidamente la invitación de su nuevo novio para ir a un hotel y pasarla en grande.
El sujeto trato a Jessica como toda una mujer, besándola y tratándola como una señorita desde el primer instante, se entendieron luego de pocos segundos, suspirando y deseando fervientemente hacerla su mujercita, sorprendiĂ©ndolo al revelarle que era su primera vez y querĂa que fuera gentil con su vaginita.
El hombre la acaricio lentamente, haciendo que Jessica experimentara un orgasmo bastante delicioso que embargaba de Ă©xtasis cada parte de su ser, desde el roce delicado de sus piernas, sintiendo sus fornidas manos de macho recorriendo su piel, hasta sus senos los cuales beso tiernamente y acaricio con dulzura, explotando todo el potencial del cuerpo de Jessica, mientras que exhalaba gimiendo y jadeando sin control, deseando que ya entrara la gran y rica polla de su hombre.
Jessica no podĂa describir lo que sentina al momento de que su gran verga penetro por primera vez su ser, sintiendo como su vagina se estremecĂa y enviaba un fuerte cosquilleo por todo su cuerpo, primero algo adolorida, terminando lentamente sintiendo como su vagina pedĂa cada vez más y encerraba el miembro de su macho.
Jessica pudo experimentar el mejor orgasmo de su corta vida al momento de que su novio se vino dentro de su ser, sintiendo su rica lechita en su interior, dejando al hombre exhausto y satisfecho, mientras que Jessica terminĂł tiernamente dormida entre sus brazos.
Poco tiempo despuĂ©s, Jessica sorprendĂa a su madre con la increĂble eh inesperada noticia de que ella y su novio estaban esperando un hijo,
su madre quedo totalmente impresionada con el cambio de su hijo durante todo este tiempo, pasando de ser un chico algo rebelde a ser toda una señorita con un gran futuro a lado de su nueva familia.Â
Muchos años despuĂ©s, una velita de cumpleaños apareciĂł frente a Jessica, era el cumpleaños de su hijo, Jessica entendiĂł por quĂ© esa velita habĂa aparecido y estaba ansiosa de saber que pasarĂa con el deseo de su niño
Mientras estaba buscando que comprarle de regalo, la mujer tambiĂ©n estaba buscando un pastelito y una vela para acompañarlo, ya no era comĂşn que hicieran fiestas de cumpleaños ni cosas asĂ, pues Jeison ya era un chico casi adulto y pensarĂa que  serĂa algo vergonzoso para Ă©l, celebrarle una fiesta de cumpleaños, asĂ que solamente decidiĂł comprarle una velita y un pastel junto con su regalo, desafortunadamente, la pobre mujer no encontraba un buen regalo para su hijo, esta vez realmente querĂa impresionarlo y con una simple playera no lo harĂa.
La mujer camino por todos lados sin encontrar nada, hasta que de repente, noto que en un extraño callejo parecĂa haber una pequeña tienda iluminada, la mujer caminĂł temerosamente hacia el lugar, ya que el letrero decĂa algo como.
“ el rey de la magia”
El nombre perfecto para una tienda a la que acudirĂas en busca del regalo perfecto para un hijo al que le gusta el tema de la magia, la mujer no lo pensĂł dos veces y entro mirando muchos objetos mágicos eh incluso criaturas extrañas que parecĂan especies no descubiertas.Â
- ¡Hola en que puedo ayudarte humana! -una agradable ancianita la sorprendĂa –
- ¡Ay, ah, hola perdón no la vi! -la mujer le contesto –
- ¡No se preocupe!, ÂżQuĂ© se le ofrece?, ÂżQuĂ© tipo de regalo quiere para su hijo?, ÂżJoyas extrañas, hechizos mágicos, brujerĂa, amarres de amor, la novia perfecta para su hijo, un cuerpo joven para usted, quiere ser la novia de su hijo acaso? -la mujer comenzĂł a hacerle muchas preguntas extrañas y algo acertadas –
- ¿Qué, pero como, porque dice eso, acaso lee la mente? –
- ¡JAJAJAJA, hay mi niña, hay muchas cosas de mà que aún no sabes! –
La mujer comenzĂł a emanar un aura verde y de repente, su cuerpo comenzĂł a transformarse en una copia de la mujer.
- ¿Qué demonios, como hizo eso?, ¡Es una bruja o algo parecido! –
- ¡Calma niña, calma! –
Entonces la mujer regresaba a su forma original, pero luciendo completamente joven.
- ¡Si, soy una bruja!, desde hace muchos miles o millones de años que lo soy, hago todo tipo de cosas, hechizos, maldiciones, soy tan sabia como cualquier Einstein o Aristóteles, tan vieja o más vieja que Chabelo y la Reina Isabel eh incluso Maribel –
- ¡Jajaja! –la mujer reĂa –
- ¡Yo se muchas cosas y puedo ser tu amiga o tu enemiga!, depende de las intenciones que tengas -
- ¡Bueno, pues yo realmente buscaba un regalo para mi hijo! –
- ¡Si, lo se!, por eso es que preguntĂ© quĂ© tipo de regalo querĂas –
- ¡Bueno yo!, realmente no lo sĂ©, ambos hemos estado algo distanciados y lo que me gustarĂa es que estemos más unidos, tambiĂ©n darle algo que verdaderamente lo sorprenda –
- ¡Bien, veamos!, tengo pociones, hechizos, podrĂa darte un medallĂłn mágico o esta Swap Note, pero siempre desaparecen de sus dueños una vez usadas ¡Jajaja! –
- ¿Swap Note? –
- ¡Ah, es solo un libro viejo!, bueno veamos, algo que necesites, como un deseo, ya sĂ©, es su cumpleaños, podrĂas regalarle esta velita de los deseos, obviamente cumple solamente un deseo por ser su cumpleaños, ni que fuera la lampara de Aladino o Shenlong –
- ¿Cómo asà velita de los deseos? –
- ¡Si niña si, cuando sople la velita y pida su deseo se cumplirá –
- ¡Ah bueno, de ser asà yo quiero mil jajaja! –
- ¡No tonta!, no es asà de fácil, además cuesta mucho, y no tienes más que para una en este momento –
- ¡Bueno!, entonces ahora mismo te la compro y pediré ser millonaria para darle todo lo que quiera a mi hijo –
- ¡Para pendeja no se estudia! –
- ¿Cómo? –
- ¡Nada, nada!, mira, no sirve si no es tu cumpleaños, la magia es poderosa y la arruinarĂas, solamente dura 24 horas de aquĂ a que la uses, asĂ que no podrĂas esperar tanto para pedir un deseo, mañana es el cumpleaños de tu hijo asĂ que servirá a menos que la desperdicie y no la use –
- ¡Esta bien, está bien!, pues me la llevo –
- ¡Bien! y como estamos en Perú, son Mil soles –
- ¡Tanto! –
-Por eso te decĂa que no traĂas más que para uno –
- ¡Umm ratera esta! –
- ¿Cómo? –
- ¡Nada…, nada! –
- ¡Puedo arrancarte el alma, darle tu cuerpo a un pervertido y comerme a tu hijo! –
- ¡Nooo, Nooo, lo siento señora bruja lo siento! –
- ¡Llámame Kata niña, Kata! –
- ¡Esta bien señora Kata! –
- ¡Bien, ahora ve a casa con tu velita! –
- ¡Pero no le eh pagado todavĂa…!, ya agarro mi dinero verdad? -_-Â
- ¡SĂ! –
- ¡Adiós y gracias, pero no vuelva a copiar mi cuerpo…! –
- ¡Ni si quiera lo pensé! –
La mama de Jeison regresaba a casa, estaba algo preocupada y ansiosa, pero querĂa realmente sorprender a su hijo, ahora estaba más emocionada que nunca, que serĂa lo que su hijo desearĂa, ojalá pudiera creerle, pero serĂa mejor que fuera una sorpresa.
Al siguiente dĂa, la mujer entro al cuarto de Jeison sorprendiĂ©ndolo.
- ¡Estas son las mañanitas que cantaba el rey David…! –
- ¡Mamá! –
- ¡Felicidades hijo! –
- ¡Gracias mama, te quiero!, pero no tenĂas que molestarte, ya sabes que no me gustan del todo las celebraciones –
- ¡Lo sĂ© hijo!, pero es que hemos estado algo distanciados y solamente querĂa acercarme un poco a ti –
- ¡Esta bien mama! –
- ¡Sopla tu velita y pide un deseo, verás que se hará realidad, lo prometo! –
- ¡Uy si, como no! –
Jeison mira la velita en el pequeño pastelito que le habĂa dado su madre, entonces miro ansioso por no saber que pedir, la velita estaba casi a punto de consumirse, asĂ como su magia y tenĂa que actuar rápido.
Luego de uso segundos, su madre miro como Jeison soplaba la velita justo a tiempo, la mujer se quedĂł en shock, esperando ver mucho dinero apareciendo de la nada o algo por el estilo, pero no sucedĂa nada.
- ¡Bueno, era de esperarse! -Jeison decĂa algo triste –
- ¡PerdĂłn hijo!, te juro que la señora que me habĂa vendido esta velita me dijo que… -
- ¡Ahhhhhh me dueleeee! –
- ¿Qué te pasa hijo, que tienes? –
Jeison comenzĂł a tocar su vientre muy adolorido, cayĂł al suelo girando en cĂrculos y de repente todo su cuerpo y a su alrededor comenzĂł a cambiar.
- ¡Pero qué hiciste Jeison! –
- ¡Mas bien que hiciste tú, me duele mucho! –
- ¡Pues que pediste de deseo! –
- ¡No se!, además no puedo decirte, sino no se cumplirá, aunque ya no se si quiero que se cumpla –
Jeison estaba en mal estado, sentĂa como todo su cuerpo le quemaba y le dolĂa, mientras que su madre estaba abrazándolo muy preocupada, mirando como todo a su alrededor cambiaba, los muebles, las paredes, la pintura, las cosas, todo, por un lado, la mujer pensĂł que habrĂa pedido ser millonarios, por lo que todo estaba cambiando para bien, pero tambiĂ©n estaba preocupada de que, para suceder, Jeison tuviera que sufrir, cosa que la bruja no le habĂa dicho.
- ¡Ahhhhhh! –
- ¡Hijo que tienes! –
Todo alrededor habĂa terminado de cambiar, de repente, la mujer admiro como el cuarto que era de su hijo parecĂa haber cambiado ahora a ser un cuarto de chica muy precioso, era más amplio y fino, aunque Ă©l seguĂa en mal estado, pero entonces Jeison comenzĂł a gritar más desesperadamente.
- ¡Mama, me dueleeee! –
La mujer trataba de entender que le pasaba su hijo cuando de repente este terminĂł inconsciente, la mujer sentĂa un golpe al corazĂłn pensando que habĂa muerto, pero de la nada, admiro como el cuerpo de su hijo comenzĂł a cambiar.
Su cabello comenzĂł a crecer, hasta hacerse más rizado y castaño, su piel se volviĂł clara  y más lisa, dejando todo el bello y sus antiguos rasgos atrás, su rostro se transformĂł en el de una bella chica, la mujer miraba y no lo podĂa creer mientras que veĂa como más cambios le  sucedĂan al  cuerpo de  su hijo, de repente, un par de senos  comenzaron a  crecerle, su cintura se redujo y sus caderas se ampliaron, dejando unas largas piernas muy lindas teniendo en medio de ellas una nueva vagina que habĂa surgido junto con todos los demás cambios.
La mujer estaba impresionada, no pensaba que su hijo deseara ser una mujer, eso no estaba en los planes, pero tenĂa que saber porque habĂa deseado tal cosa, su ropa tambiĂ©n habĂa cambiado dejando a lado su ropa de hombre por ropa femenina acorde a su cuerpo, entonces, la mujer arrullo a su nueva hija cuidándola hasta que despertara.
Mientras tanto, observo todo lo que le habĂa pasado a la casa, volviĂ©ndose una mejorada casa con todo lo que pudieran pensar, no llegando a una mansiĂłn, pero si una casa de gran nivel, al parecer, habĂa un par de carros afuera acompañando la casa, una mucama y un mayordomo esperando.
- ¡No puede ser!, no puedo creer que mi hijo haya deseado ser una niña rica –
Su madre admiraba todo realmente asombrada de que al menos pudiera desear algo para mejorar sus vidas, aunque no sabĂa en que podrĂa mejorar su vida siendo una mujercita.Â
- ¡Jessica hija, por fin despertaste! -su madre le decĂa ahora llamándola por su nuevo nombre de chica –
- ¡Mama, porque me dices Jessica! -la nueva Jessica le decĂa escuchando como sonaba su voz bastante femenina –¿QuĂ© le paso a mi voz, porque hablo asĂ? –
- ¡Jessica tú! –
- ¡Pero que son estas cosas!, ¿Qué le paso a todo mi cuerpo, porque todo es tan diferente?, ¿Dónde están los muebles, donde están mis cosas? –
- ¡Hija tú…, te convertiste en una señorita! –
- ¿Qué, como mierda paso esto? –
Jessica corrĂa al baño sintiendo como todo se en su cuerpo se movĂa tan diferente.
- ¡No puede ser, de verdad me convertà en una mujer! –
Jessica admiraba su reflejo en el espejo, nunca habĂa visto a una chica tan bonita frente a Ă©l, parecĂa un ángel, estaba realmente bonita, sus ojos tan preciosos, su cabello, su rostro, pero entonces, tambiĂ©n tenĂa tetas en el pecho y lo peor, su vejiga comenzĂł a reventar, necesitaba orinar.
- ¡Mamaaaaaaaaa, tengo una vaginaaaaaaaaa! –
Jessica gritaba desesperada al mirar que ahora tenĂa una vagina en lugar de su pene.
- ¡Hija, pues no sé qué decirte! –
- ¿Cómo orinas con esta cosa entre las piernas? –
- ¡Pues como una mujercita! –
- ¡Mamaaaaaaaaa! –
- ¡Bueno, bueno, ya!, solo tienes que relajarte, abre un poco tus piernas y tranquilamente saldrá –
- ¿As� –
Jessica trataba de hacer lo que su madre le decĂa, estaba muy nerviosa, no entendĂ aporque ahora era una chica y todo habĂa cambiado, mientras terminaba de hacer sus necesidades, Jessica notaba sus tetas, eran algo graciosas y bastante suavecitas, de repente comenzĂł a manosearlas y apenada, miro a su madre con vergĂĽenza.
- ¡Esta bien hija!, es normal, es algo que ahora es parte de tu cuerpo, es normal que quieras tocarlas –
- ¡Pero mama!, ¿Por qué me convertà en una niña? –
- ¡Pues que fue lo que deseaste! –
- ¡No sé, yo solo!, desee tener todo lo que un hombre quiere! –
- ¡Exactamente cómo! –
- ¡No sé, no se!, pensé en tener dinero y a una mujer muy sexy a la que pudiera tocar con mis propias manos… –
- ¡Jessica simplemente mĂrate ahora mismo!, estas tocándote con tus propias manos –
- ¡Ahhhhhh, no puede ser, es verdad! –
Jessica alejo sus manos de sus suavecitas tetas, cerro sus piernas repentinamente, muy nerviosa, mientras que su orina aun salĂa de su vagina, empapando todo de orina, realmente orinar de esa manera la habĂa puesto muy nerviosa.
- ¡Jessica! –
- ¡Mama! –
La mujer trataba de ayudar a su pequeña hija a limpiarse.
- ¡Tranquila Jess!, mira, las mujercitas nos limpiamos asà –
La mujer tomaba un poco de papel higiĂ©nico y lo pasaba por sus piernas, frotando suavemente desde atrás hacia delante, mientras que Jessica sentĂa como su mama tocaba su vaginita y eso comenzĂł a excitarla.
- ¡Ahhh! -Jessica soto un leve jadeo –¡Mama! –soltó un grito, algo nerviosa al escucharse –
- ¡Jeje, tranquila mi princesa!, es normal, es una parte muy sensible –
- ¡Mama, no me digas mi princesa!, yo soy un hombre no una niña –
- ¡Pues ahora eres una niña y eres mi princesa! –
- ¡Mamaaaaaaaaa! –
Terminaron de hacer sus cosas en el baño y regresaron a su habitaciĂłn, Jessica comenzĂł a notar que todo era nuevo y diferente, su ropa de chico ahora era de chica y al parecer era una ropa muy fina y cara, ropita digna para una chica de un cuerpo tan sexy y fino como el suyo, Jessica se sentĂa algo avergonzada, además todo en su cuarto era bastante femenino.
-No se porque interpreto asà tu deseo Jessica, pero no solo tu cuerpo cambio, si no toda la casa también, al parecer, ¡Ahora somos ricas! –
- ¡Pues supongo que fue por desearlo asĂ!, además, yo que me iba a imaginar que realmente se concederĂa –
- ¡Pues si verdad, que cosas jeje…! –
- ÂżPor quĂ© dices eso?, ¡Es verdad, tu querĂas con mucho Ămpetu que pidiera mi deseo!, ÂżQuĂ© sabes acerca de esta cosa? –
Jessica tomaba la velita aun derretida en su pastel ya añejado, tratando de examinarla, pero no lograba entender que contenĂa.
- ¿Esta drogada o algo as� –
- ¡No, no, es que no me lo vas a creer hija! –
- ¡Mama, soy una puta niña…!, ay no, eso se escuchó bastante mal, soy una chica, como mierda no te voy a creer –
- ¡Bueno hija yo, veras…! -
La madre de Jessica le conto todo acerca del dĂa anterior cuando se encontrĂł con aquella tienda de magia y hechicerĂa, acerca de la bruja y todo lo que habĂa pasado.
- ¡No puede ser!, me encantan las cosas mágicas, pero no terminar siendo una chica –
- ¡Lo se hija, pues tú que deseas cosas que no! –
- ¡Mamá! –
- ¡Bueno!, tendremos que ver cĂłmo nos adaptamos a esta situaciĂłn, pero no te preocupes, yo te ayudare en todo, hija mĂa –
- ¡Mama, tenemos que ir a ver a esa bruja, yo no me puedo quedar asĂ! –
La mujer inclinaba la cabeza, tampoco querĂa que su ahora hija sufriera, pero por otro lado lo estaba disfrutando, sentĂa que de esta manera podrĂa acercarse más a su ahora hija.
Luego de pensarlo, ambas acodaron salir mañana a buscar a la bruja y su tienda, mientras tanto, madre eh hija comenzaron a estudiar su cuerpo femenino y toda la grandiosa casa, al parecer ahora tanto ella como su mama tenĂan mucho dinero en el banco, tenĂan propiedades, además de la casa, una empresa y demás, realmente Jessica tenĂa todo lo que un hombre querĂa, pero Ă©l no querĂa ser una mujer el resto de su vida, ÂżO sĂ?
Jessica se sentĂa algo incomoda por tener el cuerpo de una mujer, al principio le gusto la suavidad y lo rico que sentĂa al tocar sus nuevos senos y como su madre habĂa frotado su vaginita, pero no era que quisiera quedarse asĂ para siempre, además, tuvo que practicar mucho con su madre, pasaron el resto del dĂa maquilándose y caminando con zapatillas además de tener que aprender a comportarse como señorita, a cerrar sus piernas, a hablar en pĂşblico, no caer fácilmente en la labia de un hombre que quisiera abusar de ella etc.
Jessica terminĂł bastante abrumada, no querĂa termina siendo abusada por un hombre, estos tiempos estaban muy violentos como para ser una mujer, mayor razĂłn para visitar a esa bruja y lo devolverá a ser hombre, pero lo que más temor le dio, es cuando su madre le explico lo que le pasarĂa cuando le llegara el periodo, siendo aĂşn más traumatizante que lo anterior.
Jessica estaba bastante sorprendida de lo que tenĂa que vivir si se quedara como una mujer el resto de su vida, no imaginaba tener que soportar el periodo, tener que ser acosada por los hombres y muchas más cosas de mujercita, pero sobre todo, se negaba a toda costa a terminar en la cama como un hombre, luego de que  su madre se fuera a dormir, Jessica recordĂł que aĂşn no habĂa visto sus redes sociales, tomo su nuevo IPhone 12 pro, mismo que desbloqueo  con su huella digital, revisando que le habĂan llegado muchos mensajes de personas que ni siquiera concia, todos deseándole un feliz cumpleaños, al parecer ahora para variar era una chica bastante popular, tenĂa un perfil de Instagram con muchos seguidores y amigos en su perfil de Facebook, tambiĂ©n tenĂa una cuenta de tik tok, eh incluso videos y fotos de ella misma como si hubiera sido ella misma todo este tiempo, actuando como chica y cosas del estilo.
Afortunadme, parecĂa que no tenĂa novio, solamente varios amigos con los que hablaba y parecĂa que coqueteaba, sin darse cuenta, Jessica terminĂł respondiendo algunos de los mensajes de los chicos, comenzando a verlos lindos y atractivos, su sonrisa lo decĂa todo al responder, cada mensaje que respondĂa, era una rosa que le caĂa, desconociendo lo que estaba sucediendo en su mente y lo que provocaba al sentir en todo su cuerpo.
Finalmente, se tomĂł un par de fotitos respondiendo generalmente a todos por sus felicitaciones y regreso a la cama para descansar luego del tan alocado dĂa.
Al dĂa siguiente, Jessica y su madre retomaban sus actividades femeninas, Jessica comenzĂł a lidiar por su cuenta al tratar su cuerpo femenino, recordando todo lo que habĂa practicado con su madre, vistiĂ©ndose bastante femenina, actuando realmente como una chica eh incluso parecĂa ya haberse adaptado muy bien a serlo, su madre estaba sorprendida el cambio de Jessica de un dĂa a otro, mientras que desayunaban y terminaban para alistarse en la bĂşsqueda de la bruja.
Jessica tomĂł su nuevo auto y condujo junto a su madre al lugar donde habĂa encontrado a la bruja, pero luego de buscar y de buscar, jamás encontraron el lugar donde habĂa estado la bruja, parecĂa que se la habĂa tragado la tierra, (realmente habĂa ido a otro sitio a una nueva aventura).
Jessica y su madre estaban desesperadas, aunque por dentro ambas deseaban que sus nuevas vidas continuaran.
- ¡Yo no quiero seguir asà mama!, pero sà de este hermoso cuerpo depende de que tengamos nuestra nueva y grandiosa vida, tomare el sacrificio de quedarme asà por siempre –
- ¡Ay hija!, perdĂłname en verdad, yo no querĂa que las cosas terminaran asà –
- ¡No mama!, no tienes la culpa de nada, este ha sido el mejor regalo que hayas podido darme, sabes…, me encanta mi nueva vida –
Su madre la miraba impresionada, realmente veĂa un gran cambio en su nueva hija, se sintiĂł bastante feliz y ambas regresaron a su grandiosa nueva vida.
Los  dĂas pasaron y la nueva Jessica estaba completamente feliz con su cuerpo y su vida de chica, le encantaba tener la atenciĂłn de  todo el mundo, por su grandioso cuerpo y su fama, recordaba como antes estaba sufriendo porque podrĂa  terminar con su novia, cosa que lo tenĂa asĂ de deprimido, pero luego del regalo de su madre, todo cambio, comenzĂł a  sentirse más viva, más feliz y deseada, mirando como todos  sus seguidores aclamaban por ella, pero además, le encantaba tener  ese  grandioso par de tetas, poder estrujarlas y disfrutar de ellas en todo momento, Jesica no podĂa creer que luego de  odiar verse como una mujercita ahora era  toda  una verdadera putita.
Se tomaba fotos atrevidas, eh incluso abriĂł una cuenta de OnlyFans, donde vendĂa fotitos de su cuerpo, para llamar la atenciĂłn y ganar cada vez más dinero, lo cual la hacĂa feliz, sobre todo por tener la atenciĂłn de muchos hombres que la acosaban y la hacĂan sentir una verdadera mujer.
Su madre estaba muy feliz tambiĂ©n de tener a su nueva hija, ahora eran más unidas y platicaban mucho acerca de cosas de mujercitas, salĂan de compras a los centros comerciales más caros y finos de la ciudad además de comer en lugares de alto prestigio, su vida habĂa mejorado para mucho, pero lo que más le impresionaba a su madre, era ver como Jessica se habĂa adaptado bastante a las cosas de chica, si bien, su primera vez con su periodo fue un desastre, pero con el tiempo, la nueva Jessica se fue adaptando a eso y mucho más, tambiĂ©n le sorprendĂa lo bien que hablaban acerca de hombres, de cĂłmo estos lucĂan atractivos y de cĂłmo deseaba poder tener a uno de ellos como novio.
Luego de un tiempo, Jessica habĂa conocido a un seguidor de su red social, la habĂa invitado a pasar el dĂa y Jessica no se negĂł, obviamente primero se aseguraron de que el tipo fuera real y no fuera un delincuente, Jessica habĂa pasado el mejor dĂa de su vida a su lado, pues luego de pasear por toda la ciudad y de pasar un dĂa agradable, sucediĂł lo que Jessica tanto anhelaba, poder convertirse en una mujercita de verdad.
Y es que Jessica no se quedó sin ese gran premio, acepto rápidamente la invitación de su nuevo novio para ir a un hotel y pasarla en grande.
El sujeto trato a Jessica como toda una mujer, besándola y tratándola como una señorita desde el primer instante, se entendieron luego de pocos segundos, suspirando y deseando fervientemente hacerla su mujercita, sorprendiĂ©ndolo al revelarle que era su primera vez y querĂa que fuera gentil con su vaginita.
El hombre la acaricio lentamente, haciendo que Jessica experimentara un orgasmo bastante delicioso que embargaba de Ă©xtasis cada parte de su ser, desde el roce delicado de sus piernas, sintiendo sus fornidas manos de macho recorriendo su piel, hasta sus senos los cuales beso tiernamente y acaricio con dulzura, explotando todo el potencial del cuerpo de Jessica, mientras que exhalaba gimiendo y jadeando sin control, deseando que ya entrara la gran y rica polla de su hombre.
Jessica no podĂa describir lo que sentina al momento de que su gran verga penetro por primera vez su ser, sintiendo como su vagina se estremecĂa y enviaba un fuerte cosquilleo por todo su cuerpo, primero algo adolorida, terminando lentamente sintiendo como su vagina pedĂa cada vez más y encerraba el miembro de su macho.
Jessica pudo experimentar el mejor orgasmo de su corta vida al momento de que su novio se vino dentro de su ser, sintiendo su rica lechita en su interior, dejando al hombre exhausto y satisfecho, mientras que Jessica terminĂł tiernamente dormida entre sus brazos.
Poco tiempo despuĂ©s, Jessica sorprendĂa a su madre con la increĂble eh inesperada noticia de que ella y su novio estaban esperando un hijo,
su madre quedo totalmente impresionada con el cambio de su hijo durante todo este tiempo, pasando de ser un chico algo rebelde a ser toda una señorita con un gran futuro a lado de su nueva familia.Â
Muchos años despuĂ©s, una velita de cumpleaños apareciĂł frente a Jessica, era el cumpleaños de su hijo, Jessica entendiĂł por quĂ© esa velita habĂa aparecido y estaba ansiosa de saber que pasarĂa con el deseo de su niño
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