Hola mi nombre es Diego, esta es la historia de como me fui convirtiendo o mejor dicho dándome cuenta de que soy una sissy, que nací para satisfacer a los machos y que nunca podría satisfacer a una mujer.

Desde chico vivo con mi mama soltera que posiblemente sea una de las razones por mi deseo de machos.
Mi condición de sissy no me era tan clara al principio. Al menos a para mi, yo pensaba que era un chico normal, pero claramente mi entorno notaba algo que yo no.
El primer recuerdo es un cumple cuando era muy chico nos hicieron disfrazar a los nenes de caballeros y a las nenes de princesas. Como se habían quedado sin disfraz de caballeros me disfrazaron de princesa. Luego nos hicieron bailar con algún compañero y yo recuerdo que termine bailando con un chico que me molestaba. No recuerdo tanto de esa época pero sí de eso, se ve que algo marcó en mi.

Mas de adolescente, me sufría bullying siempre me cargaban de puto, trolo, marica. Yo no entendía por qué, para mi yo era un chico normal, pero se ve que para afuera exponía algo mas. Yo tampoco nunca me defendí muchos de estas acusaciones y deje que siguieran. Me acuerdo que incluyo algunas profes pensaban que efectivamente era maricón por algunos comentarios que decían. Iba colegio de solo varones y siempre me elegían para lo que implicara un rol femenino.

También me pasaba con mi grupo amigos del barrio que era el típico grupo bien hetero de futbol, minas, etc. Un grupo totalmente separado del de la escuela y que no sabían que me hacían bullying por puto. También era blanco de jodas con respecto a eso. Adicionalmente con este grupo como íbamos a un club, nos bañábamos en los vestuarios y sabíamos como era las pijas de cada uno. Obviamente quien tenia la pija mas chica. Adivinaron y por bastante margen, obviamente también me jodían por eso.
Se ve que mi personalidad sumisa y mi físico y forma de actuar eran algo afeminadas y el resto de la gente notaba algo en mi.
En esa época yo pensaba que era hetero y que me gustaban las mujeres. Pero tenia ciertas contradicciones que cada vez fueron mas grandes.

En el sentido romántico sí me gustaban pero me pasaba que cuando miraba porno (hetero) siempre me imaginaba que era la mina (por ejemplo la de las imágenes), de otra forma no podía acabar. En ese momento no me parecía algo tan raro, hoy en día queda mas que claro es siempre fui una sissy y que quería ser la mujer de un macho.

En esta época también empecé a curiosear con la ropa femenina. Mientras mi mama estaba afuera me empece a probar sus bombachitas, tangas, corpiño y toda la ropa que encontrara. Se me hizo casi una rutina.
Me acuerdo una tarde buscando por su armario me encontré detrás del cajón una bolsa con un montón de lencería de trola. No lo podía crear que mi mama tenga eso. Tenia medias de red, portaligas, disfraces, una pollerita súper corta y abierta a los costados. Nunca había visto ropa tan de puta jaj. Obviamente mi instinto fue probármela inmediatamente. La excitación de verme con esa ropa era incontenible. No podía creer como me veía con esa ropa, parecía toda una puta y me encantaba. En mi calentura me deje la lencería puesta, mi ropa de chico arriba y salí caminar. Fue la caminata mas caliente de mi vida, me acuerdo que cuando veía una persona no podía creer que yo estaba ahí con toda esa lencería puesta y nadie se lo imaginaba.

Mi vida fue transcurriendo en esa rutina. Aumentando cada vez mas mi gusto por la ropa femenina. Yendo todos los día a la escuela acostumbrándome a que me llamen puto. Algún que otro compañero o amigo me daba nalgadas jodiéndome, al principio capaz reaccionaba un poco a lo ultimo simplemente las aceptaba sin decir nada.

En mi grupo de amigos también me humillaba frentes a otra minas, capaz justo nos juntábamos con alguna chicas de barrio y apenas yo quería chamuyar me trataban de puto o manicero y medio que las pibas se reían y después no me daban mucha bola o peor se sumaban a los chistes.
Ademas de eso todos los días veía porno y todos los día me imaginaba que era riley reid (imagenes). Todo eso durante mucho tiempo me fue moldeando, transformándome, para de a poco aceptar que capaz no nací para ser hetero y que mi destino siempre fue el de ser una mariquita.
En siguiente gran paso creo que fue cuando empecé a experimentar con mi culito pero creo que lo voy a continuar en otro relato.

Si les pareció interesante comenten para ver si sigo con una segunda parte.
Espero que les haya gustado.

Desde chico vivo con mi mama soltera que posiblemente sea una de las razones por mi deseo de machos.
Mi condición de sissy no me era tan clara al principio. Al menos a para mi, yo pensaba que era un chico normal, pero claramente mi entorno notaba algo que yo no.
El primer recuerdo es un cumple cuando era muy chico nos hicieron disfrazar a los nenes de caballeros y a las nenes de princesas. Como se habían quedado sin disfraz de caballeros me disfrazaron de princesa. Luego nos hicieron bailar con algún compañero y yo recuerdo que termine bailando con un chico que me molestaba. No recuerdo tanto de esa época pero sí de eso, se ve que algo marcó en mi.

Mas de adolescente, me sufría bullying siempre me cargaban de puto, trolo, marica. Yo no entendía por qué, para mi yo era un chico normal, pero se ve que para afuera exponía algo mas. Yo tampoco nunca me defendí muchos de estas acusaciones y deje que siguieran. Me acuerdo que incluyo algunas profes pensaban que efectivamente era maricón por algunos comentarios que decían. Iba colegio de solo varones y siempre me elegían para lo que implicara un rol femenino.

También me pasaba con mi grupo amigos del barrio que era el típico grupo bien hetero de futbol, minas, etc. Un grupo totalmente separado del de la escuela y que no sabían que me hacían bullying por puto. También era blanco de jodas con respecto a eso. Adicionalmente con este grupo como íbamos a un club, nos bañábamos en los vestuarios y sabíamos como era las pijas de cada uno. Obviamente quien tenia la pija mas chica. Adivinaron y por bastante margen, obviamente también me jodían por eso.
Se ve que mi personalidad sumisa y mi físico y forma de actuar eran algo afeminadas y el resto de la gente notaba algo en mi.
En esa época yo pensaba que era hetero y que me gustaban las mujeres. Pero tenia ciertas contradicciones que cada vez fueron mas grandes.

En el sentido romántico sí me gustaban pero me pasaba que cuando miraba porno (hetero) siempre me imaginaba que era la mina (por ejemplo la de las imágenes), de otra forma no podía acabar. En ese momento no me parecía algo tan raro, hoy en día queda mas que claro es siempre fui una sissy y que quería ser la mujer de un macho.

En esta época también empecé a curiosear con la ropa femenina. Mientras mi mama estaba afuera me empece a probar sus bombachitas, tangas, corpiño y toda la ropa que encontrara. Se me hizo casi una rutina.
Me acuerdo una tarde buscando por su armario me encontré detrás del cajón una bolsa con un montón de lencería de trola. No lo podía crear que mi mama tenga eso. Tenia medias de red, portaligas, disfraces, una pollerita súper corta y abierta a los costados. Nunca había visto ropa tan de puta jaj. Obviamente mi instinto fue probármela inmediatamente. La excitación de verme con esa ropa era incontenible. No podía creer como me veía con esa ropa, parecía toda una puta y me encantaba. En mi calentura me deje la lencería puesta, mi ropa de chico arriba y salí caminar. Fue la caminata mas caliente de mi vida, me acuerdo que cuando veía una persona no podía creer que yo estaba ahí con toda esa lencería puesta y nadie se lo imaginaba.

Mi vida fue transcurriendo en esa rutina. Aumentando cada vez mas mi gusto por la ropa femenina. Yendo todos los día a la escuela acostumbrándome a que me llamen puto. Algún que otro compañero o amigo me daba nalgadas jodiéndome, al principio capaz reaccionaba un poco a lo ultimo simplemente las aceptaba sin decir nada.

En mi grupo de amigos también me humillaba frentes a otra minas, capaz justo nos juntábamos con alguna chicas de barrio y apenas yo quería chamuyar me trataban de puto o manicero y medio que las pibas se reían y después no me daban mucha bola o peor se sumaban a los chistes.
Ademas de eso todos los días veía porno y todos los día me imaginaba que era riley reid (imagenes). Todo eso durante mucho tiempo me fue moldeando, transformándome, para de a poco aceptar que capaz no nací para ser hetero y que mi destino siempre fue el de ser una mariquita.
En siguiente gran paso creo que fue cuando empecé a experimentar con mi culito pero creo que lo voy a continuar en otro relato.

Si les pareció interesante comenten para ver si sigo con una segunda parte.
Espero que les haya gustado.
6 comentários - Inicios sissy
Si esperamos la continuidad