Mi hermana y yo nos besábamos muy apasionadamente, las lenguas se tocaban y se enrollaban en un mar de excitación, el carro de mi papa era espacioso, así que mi imaginación volaba y tenía en mente muchas cosas, así que empecé por colar mis dedos en sus pantys y mis labios recorrían desde su boquita, sus mejillas, su cuello hasta bajarle un poco el vestido y empezar a lamerle sus pezones, los cuales ya están endurecidos.

Mi hermana empezaba a retorcerse mientras me pajeaba más rápido, mi liquido preseminal empezaba a salir y facilitaba los movimientos de mi hermana, no sé si era por los videos, pero mi hermana empezaba a usar sus dedos para jugar con mi cabeza, hacia que mis piernas temblaran, pero yo seguía en mi tarea, de masturbar a mi hermana y lamerle las tetas hasta hacerla venir.


-Yo: ¿te gusta que te toque y te lama hermanita?
-Hermana: Si, mucho, pero quiero aprovechar el tiempo y que hacerte lo que tanto te gusta.
-Yo: ¿Me la quieres chupar acá en el carro?
-Hermana: si, déjame acomodarme para que no pares de tocar mi vagina.
Mi hermana se acomoda y queda casi recostada en mi pelvis, acercando mi verga a su boca empiezo a sentir ese calor que emana su delicioso aliento, mientras tanto yo vuelvo a buscar su vagina para seguirla masturbando mientras me chupa, empezaba a meter y a sacar mi verga de subo quita, a veces lento, a veces rápido, me sentía en la gloria, tanta era mi excitación que sentía ya mi orgasmo venir.

-Yo: Hermana para, y cambiemos, ahora yo quiero hacerte sentir bien, ahora si no tienes que aguantarte ni hacer silencio.
-Hermana: ¿de verdad? Pero no sé qué tanto me pueda contener, que tal nos escuchen.
-Yo: No nos van a escuchar quédate tranquila y acuéstate.
Mi hermana se recuesta y queda boca arriba, desde mi vista podía ver la hermosura de su cara caliente, con algo de saliva alrededor de su boca, su cabello despeinado por la tremenda mamada que me acaba de hacer, lo mejor era que su vagina brillaba por lo mojada que estaba, al verla me le lance como un desquiciado a pasarla de arriba abajo, buscando su clítoris, metiendo y sacando la lengua de su hoyito, mientras tanto ella se retorcía cada vez más, aumentaban sus gemidos hasta que empieza a temblar y a contraerse, había entendido que estaba llegando al orgasmo.


-Hermanita: aahhh espera, ahhh espera, espera, estoy muy sensible en mi vagina ya, no aguanto más espera un ratito ah ah.
-Yo: Se nota que te gusto, como me gusta que hagas todo eso.
-Hermana: no soy yo, es inevitable, no sé qué siento por dentro, pero es algo que me hace perder el control ahh.
Mi hermana queda rendida, boca arriba con las piernas abiertas, yo con mi erección en todo su esplendor me quedo observando que su vagina está a tan solo unos centímetros de mi verga, si, ya sabía quehacer, tomé mi pene y empecé a rozarlo con la vagina de mi hermana.

-Hermana: ¿Qué haces? Sigo muy sensible, me dan como corrientazos en la vagina.
-Yo: tranquila esto te ayudara a relajarte y a sentir más rico que lo que sentiste ahora.
-Hermana: ¿estás seguro? Mira que tú me has mostrado videos donde el hombre mete el pene en la vagina de la mujer, pero ya sé que así escomo quedan embarazadas, así que no quiero que lo hagas.
-Yo: tranquila hermana, solo quiero rozarlo.
Yo seguía rozando y rozando, cada vez iba viendo como mi hermana volvía a gemir poco a poco, sabía que se estaba volviendo a excitar, prácticamente la estaba masturbando con mi verga, los fluidos de los hacía que se sintiera delicioso el roce, hasta que un momento a otro baje un poco más mi pene lo deje en la entrada de la vagina, empecé a empujar poco a poco.

-Hermana: No hermano, no quiero, me está empezando a doler.
-Yo: solo es un poco, solo será la puntita, se siente muy rico.
-Hermana: Pero a mí me está doliendo, por favor para.
-Yo: ¿te acuerdas de como las mujeres gimen y saltan sobre los penes en los videos porno? Es porque cuando ya está adentro se siente bien
Seguía empujando lentamente para no lastimar mucho a mi hermana, a mí también me dolía un poco porque era mi primera vez, pero eran más mis ganas de penetrarla, ella empezaba a tratar de empujarme, pero yo estaba encima, cuando siento que algo adentro de ella cedió, y mi pene entro más aún.
-Hermana: ahhh nooo hermano, me duele me duele.
-Yo: Tranquila hermana, ahh ya va a entrar.
-Hermana: eres un mentiroso, dijiste que era solo la puntano quiero más.
-Yo: lo siento hermana, no puedo parar.

Empecé a meter y a sacar mi verga, era lo más rico que había sentido, era mi primera vez, si, con mi hermana, estaba follandola en el carro de papa, poco a poco iba metiendo más la verga hasta poder meterla toda, mi hermana ya no se quejaba tanto, pero ya no veía en su cara excitación, más bien como resignación. Empecé a darle más rápido y ella empezaba a gemir.
-Yo: ¿ahora si te está gustando?
-Hermana: si, pero me mentiste y no me escuchaste ahh.
-Yo: lo siento, no volverá a suceder, ven cambiemos de posición.

Acomode a mi hermana de tal manera que quedara en 4 patas y yo a tras de ella, ver esas nalgas me hizo excitar aún más, tome mi verga y la roce con la vagina de ella, luego apunte a su hoyito y volví a penetrarla, cada vez más fuerte, en esta pose ella gemía más y veía como sus manos apretaban el asiento del carro, sabía que le estaba gustando, pero no pronunciaba ni una sola palabra.

Le doy tan duro y tan rápido que siento que voy a eyacular, no puedo evitarlo y aunque quería disfrutar más de ese momento fue inevitable correrme en sus nalgas, sentía como mi semen llegaba y saqué la verga rápidamente como en los videos porno y empecé a pajearme, dejando caer mis chorros de semen en las nalgas de mi hermana, todo se veía tan erótico, era el mejor día de mi vida.

Sin embargo, no todo era color de rosa, yo me sentía muy bien, pero mi hermana no, ella lentamente se recompuso y con el mismo vestido de ella se secaba mis gotas de semen, luego se sentó y no decía ninguna palabra, yo no entendía su cambio de humor, sin embargo, pensé que era por haber sido su primera vez, yo me empecé a vestir, y a secar todos nuestros fluidos del carro, cuando terminé le agradecí, pero lo que me dijo ella me iba a dejar sin palabras.
Lo siento mucho por la demora, se me presentaron inconvenientes y no me daba tiempo de continuar mi relato, igual gracias a los que me escribieron que continuara la historia...

Mi hermana empezaba a retorcerse mientras me pajeaba más rápido, mi liquido preseminal empezaba a salir y facilitaba los movimientos de mi hermana, no sé si era por los videos, pero mi hermana empezaba a usar sus dedos para jugar con mi cabeza, hacia que mis piernas temblaran, pero yo seguía en mi tarea, de masturbar a mi hermana y lamerle las tetas hasta hacerla venir.


-Yo: ¿te gusta que te toque y te lama hermanita?
-Hermana: Si, mucho, pero quiero aprovechar el tiempo y que hacerte lo que tanto te gusta.
-Yo: ¿Me la quieres chupar acá en el carro?
-Hermana: si, déjame acomodarme para que no pares de tocar mi vagina.
Mi hermana se acomoda y queda casi recostada en mi pelvis, acercando mi verga a su boca empiezo a sentir ese calor que emana su delicioso aliento, mientras tanto yo vuelvo a buscar su vagina para seguirla masturbando mientras me chupa, empezaba a meter y a sacar mi verga de subo quita, a veces lento, a veces rápido, me sentía en la gloria, tanta era mi excitación que sentía ya mi orgasmo venir.

-Yo: Hermana para, y cambiemos, ahora yo quiero hacerte sentir bien, ahora si no tienes que aguantarte ni hacer silencio.
-Hermana: ¿de verdad? Pero no sé qué tanto me pueda contener, que tal nos escuchen.
-Yo: No nos van a escuchar quédate tranquila y acuéstate.
Mi hermana se recuesta y queda boca arriba, desde mi vista podía ver la hermosura de su cara caliente, con algo de saliva alrededor de su boca, su cabello despeinado por la tremenda mamada que me acaba de hacer, lo mejor era que su vagina brillaba por lo mojada que estaba, al verla me le lance como un desquiciado a pasarla de arriba abajo, buscando su clítoris, metiendo y sacando la lengua de su hoyito, mientras tanto ella se retorcía cada vez más, aumentaban sus gemidos hasta que empieza a temblar y a contraerse, había entendido que estaba llegando al orgasmo.


-Hermanita: aahhh espera, ahhh espera, espera, estoy muy sensible en mi vagina ya, no aguanto más espera un ratito ah ah.
-Yo: Se nota que te gusto, como me gusta que hagas todo eso.
-Hermana: no soy yo, es inevitable, no sé qué siento por dentro, pero es algo que me hace perder el control ahh.
Mi hermana queda rendida, boca arriba con las piernas abiertas, yo con mi erección en todo su esplendor me quedo observando que su vagina está a tan solo unos centímetros de mi verga, si, ya sabía quehacer, tomé mi pene y empecé a rozarlo con la vagina de mi hermana.

-Hermana: ¿Qué haces? Sigo muy sensible, me dan como corrientazos en la vagina.
-Yo: tranquila esto te ayudara a relajarte y a sentir más rico que lo que sentiste ahora.
-Hermana: ¿estás seguro? Mira que tú me has mostrado videos donde el hombre mete el pene en la vagina de la mujer, pero ya sé que así escomo quedan embarazadas, así que no quiero que lo hagas.
-Yo: tranquila hermana, solo quiero rozarlo.
Yo seguía rozando y rozando, cada vez iba viendo como mi hermana volvía a gemir poco a poco, sabía que se estaba volviendo a excitar, prácticamente la estaba masturbando con mi verga, los fluidos de los hacía que se sintiera delicioso el roce, hasta que un momento a otro baje un poco más mi pene lo deje en la entrada de la vagina, empecé a empujar poco a poco.

-Hermana: No hermano, no quiero, me está empezando a doler.
-Yo: solo es un poco, solo será la puntita, se siente muy rico.
-Hermana: Pero a mí me está doliendo, por favor para.
-Yo: ¿te acuerdas de como las mujeres gimen y saltan sobre los penes en los videos porno? Es porque cuando ya está adentro se siente bien
Seguía empujando lentamente para no lastimar mucho a mi hermana, a mí también me dolía un poco porque era mi primera vez, pero eran más mis ganas de penetrarla, ella empezaba a tratar de empujarme, pero yo estaba encima, cuando siento que algo adentro de ella cedió, y mi pene entro más aún.
-Hermana: ahhh nooo hermano, me duele me duele.
-Yo: Tranquila hermana, ahh ya va a entrar.
-Hermana: eres un mentiroso, dijiste que era solo la puntano quiero más.
-Yo: lo siento hermana, no puedo parar.

Empecé a meter y a sacar mi verga, era lo más rico que había sentido, era mi primera vez, si, con mi hermana, estaba follandola en el carro de papa, poco a poco iba metiendo más la verga hasta poder meterla toda, mi hermana ya no se quejaba tanto, pero ya no veía en su cara excitación, más bien como resignación. Empecé a darle más rápido y ella empezaba a gemir.
-Yo: ¿ahora si te está gustando?
-Hermana: si, pero me mentiste y no me escuchaste ahh.
-Yo: lo siento, no volverá a suceder, ven cambiemos de posición.

Acomode a mi hermana de tal manera que quedara en 4 patas y yo a tras de ella, ver esas nalgas me hizo excitar aún más, tome mi verga y la roce con la vagina de ella, luego apunte a su hoyito y volví a penetrarla, cada vez más fuerte, en esta pose ella gemía más y veía como sus manos apretaban el asiento del carro, sabía que le estaba gustando, pero no pronunciaba ni una sola palabra.

Le doy tan duro y tan rápido que siento que voy a eyacular, no puedo evitarlo y aunque quería disfrutar más de ese momento fue inevitable correrme en sus nalgas, sentía como mi semen llegaba y saqué la verga rápidamente como en los videos porno y empecé a pajearme, dejando caer mis chorros de semen en las nalgas de mi hermana, todo se veía tan erótico, era el mejor día de mi vida.

Sin embargo, no todo era color de rosa, yo me sentía muy bien, pero mi hermana no, ella lentamente se recompuso y con el mismo vestido de ella se secaba mis gotas de semen, luego se sentó y no decía ninguna palabra, yo no entendía su cambio de humor, sin embargo, pensé que era por haber sido su primera vez, yo me empecé a vestir, y a secar todos nuestros fluidos del carro, cuando terminé le agradecí, pero lo que me dijo ella me iba a dejar sin palabras.
Lo siento mucho por la demora, se me presentaron inconvenientes y no me daba tiempo de continuar mi relato, igual gracias a los que me escribieron que continuara la historia...
9 comentários - Inocencia entre hermanos #7