
Las aventuras de Lupita capitulo 23
Mediante engaños don Severiano queda a solas con la novia de su hijastro la muy apetecible Lupita
--Pásale… pásale princesa…, el vejete se tuvo que aguantar las ganas de abalanzársele y violarla de cualquier forma posible, a la muy apetecible jovencita de solo 19 añitos.
--Donde está el?, pregunto Lupita con su carita de preocupación, --Está en mi recamara, lo puse ahí ya que estará más cómodo… vamos dale yo te llevo…
--Ay gracias por avisarme don Severiano… y que es lo que tiene?, fue lo último que pregunto la desprevenida jovencita cuando al llegar e ingresar al dormitorio matrimonial del vejete percatarse que este estaba vacío y que su Novio Rodrigo no estaba en la cama como ya ella se lo había imaginado…
--Qué opinas preciosura… no es una maravilla que al fin podamos estar solitos y con una cama disponible para nosotros solos!?
Para la nena las palabras de don Severiano habían sido claras: “la cama estaba dispuesta para ellos solos”, sin ánimos de voltearse y solo escuchando la pesada respiración del viejo a sus espaldas con voz asustada y roja por una extraña vergüenza que la invadía quiso preguntar aquello que ella ya sabía,
--Don… de… esta Ro… dri… gooo…?.......--Tuvo que salir, lo vino a buscar otra chica que él tiene a tus espaldas… jajaja… así que tenemos casi todo el día solo para nosotros…
--Es Usted un embustero… como se le ocurre mentirme de esa forma…
--Cállate encuinclaaaa!!!, bramo el vejete como un verdadero cavernícola, --Esta es mi casa…y aquí el único que levanta la voz soy yo!!, te queda claro zorraaaa!!!!
Lupe quien había tenido un mínimo de valentía para encarar al desalmado de don Severiano, cambio de opinión en el acto, recién se percató que el viejo tenía un brillo extraño en sus ojos los cuales se le notaban enrojecidos, sin ni siquiera proponérselo bajo su vista hasta su verga en donde claramente y por sobre el pantalón de tela se le veía que este la tenía tremendamente parada, automáticamente sus hermosas piernas comenzaron a temblar, como así mismo en sus propios oídos creía sentir los latidos de su corazón, el viejo ya se le venía acercando,
--Nooo don Severianooo… por favor nooooo… fue lo único que salió de los labios de la colegiala cuando en su mismo cuerpo sintió que era tomada brutamente desde su cintura por el padrastro de su novio, el viejo la giro y la arrimo contra un viejo mueble de madera que era usado por su mujer para mantener sus utensilios personales.
El vejete al tenerla de espaldas a él no podía quitar la vista de ese tremendo culazo que la nena se gastaba y escondía bajo aquel soberbio vestido azul, le miraba y dimensionaba sus grandes y bien proporcionadas nalgas, como pudo le ubico su endurecida herramienta justo al medio de estas, estaba decidido a cogérsela lo antes posible…
--Que trasero tan sublime es el que te gastas mocosa, tienes un culazo descomunal le decía don Severiano mirándole las nalgotas y moviendo su cara a los lados como no creyéndosela de lo que tenía antes sus ojos, no dudo en comenzar a sobárselas pausadamente a la muy asustada Lupita.
El vejete quien estaba como poseído por la atracción que sentía por esas delineadas formas que tenía en estos momentos para el solo no dudo en comenzar a sobajearla por todo su cuerpo y por sobre el vestido, sobre todo tanteándole las tetas, pensó en que la quería tener encuerada lo más rápido posible, a la vez que le decía en uno de sus oídos, --Como te dije el otro día chiquilla… eres una bebota muy linda, que tremendo cuerpo es el que tienes cosita rica, lo que te dije recién es la purita verdad… pero es cosa tuya si me quieres creer o no, pero ese maricon que tienes por novio no te merece lindura, jejejeje, le susurraba desde atrás en su oído, en ese momento Lupe sintió los peludos brazos del viejo que pasaban entre medio de los de ella para comenzar a puntearla contra el antiguo mueble de madera.
Don Severiano aprovechando la pasividad de la colegiala, subió sus manazas hasta los suaves hombros de Lupe y se propuso a correr los tirantes del vestido con claras intenciones de comenzar a desnudarla, lo que hiso que la chica reaccionara casi al instante,
--Don Severianooo… no! que hace!?... que es lo que quiereeee!!? El viejo percatándose de que la colegiala estaba resistiéndose fue directo al grano,
--Jajajaja!!, me gusta que quieras ir directo al punto pendeja, la verdad es que el otro día me dejaste más que caliente, y si quieres saber qué es lo que quiero ahora, pues bien te lo diré: Quiero culearte!!!, el otro día note como estabas de caliente y si no hubiese sido porque las otras viejas llamaron a cenar lo más probable es que te hubiera culeado en la parte trasera de mi jardín, jajajaja lo hubieras pasado riquísimo, si hasta ya te habías puesto en posición de chuparme el Pingo, jajajaja…
Lupe solo miraba a aquel hombre muy asustada, que se este se esmeraba en recordarle lo mucho que ella lo atraía y las ganas que le tenía, sino que también tenía que humillarla de esa forma, diciéndole todo tipo de peladeces, en eso sintió que el viejo nuevamente la tomaba y la contraía ahora contra su pecho, tal como lo había hecho en su patio, pero ahora lo hacía con más propiedad, el vejete sin ni siquiera disimularlo ni nada parecido metió sus manos por debajo del vestido de la colegiala para comenzar a magrearle el culo a sus anchas, para luego continuar con sus peladeces,
--Pues mira nada más el par de nalgotas que te gastas chiquilla endemoniada, a ver si están tan duras como me las imaginaba… Plaaaafffffff!!!!!!, fue tan fuerte la nalgada en el culo que le asesto don Severiano que hizo que de la chica se escuchara un fuerte grito de dolor, el viejo solo empezó a reír carcajadas mientras le decía, --No me has decepcionado pendeja, te gastas un culo duro y bien parado, justo como a mí me gustan, no hay duda que disfrutare meterte mi verga por el orto, jajajajaja!!!, espero que este tan apretado como me lo he imaginado en las numerosas pajas que me he hecho en tu honor putaaa!!!
--Bien putita ya no hay más tiempo que perder, don Severiano le hablaba con cara de pervertido mientras la recorría de pies a cabeza como si se la estuviera comiendo con su caliente mirada de violador recién salido de una cárcel, su respiración ya era acelerada, --Aprovechemos que ahora no está mi mujer en la casa y que tampoco está el imbécil de su hijo, jajajaja, nos vamos a dedicar a culear como dos perros calientes, jajajaja.
En ese mismo momento la petrificada Lupita presenciaba como el caliente de su casi suegro se bajaba el cierre de su pantalón y sacaba su miembro erecto para que ella pudiera vérselo nuevamente, la colegiala que estaba absorta en una esquina de la recamara quedó impresionada pero al mismo tiempo intimidada, pues la verga de aquel viejo otra vez se veía enorme, la joven miraba como aquella descomunal tranca no solo era gruesa y venosa, sino que también era bastante larga y encorvada hacia arriba, la veía pulsar agitadamente dando la impresión que aquella tremenda cosa tenia pulmones propios y respiraba agitadamente, sus ojitos se trasladaron a una frondosa maraña de pelos negros en la base de esta, ahora sí que la veía con total nitidez y no en la oscuridad como había sido la vez anterior, la nena se percataba también que esa aterradora verga además de tener una tremenda cabeza gorda también la tenía muy morada, todo eso que estaba presenciando eran una conjunción que sencillamente la horrorizaban, pues sabía que las intenciones de don Severiano eran culearsela lo más que pudiera hasta descargar todo su hirviente semen completamente adentro de ella.
Estando Lupe en total estado de conmoción por lo que le iba a pasar y extrañamente estando también casi hipnotizada por las demenciales medidas de aquella aparatosa verga que más se parecía a la de un animal que a la de un hombre normal, sintió que fue tomada por un brazo y que su próximo violador ya la arrastraba hacia el lecho matrimonial,
--No don Severianooo… por favor… no me lleve a la camaaaa!!!, exclamaba penosamente la colegiala y forcejeando para que don Seve no lograra su caliente cometido, la chica en su desesperación admitía que si bien la vergota del viejo era alucinante para ella, estaba casi segura que esta no le cabria ni por la boca, menos por sus otros dos orificios se decía para sus adentros en forma agobiada, lo que la llevo a oponer una férrea resistencia con tal de impedir que el aprovechador padrastro de su novio se la cogiera, sin embargo entre medio de jadeos, pataleos y empellones no fueron suficientes para que el infeliz viejo cesara en sus lujuriosas intenciones.
El viejo a sabiendas que con su brutal tratamiento había intimidado a la chica, aprovecho para terminar de sacarse la ropa dejando al descubierto la verga totalmente parada y ya casi rugiendo por meterse en las jóvenes carnes vaginales que al parecer esta ya había olido, para luego su bestial dueño simplemente echarse sobre la cama a tomar lo que prácticamente ya era de él.
--Don Severiano… snifff… por favor no me lo vaya a hacer… sniffssss… yo soy la novia de su hijastro, snifffssss, con esto la nena pensó erróneamente que quizás el viejo se la pensaría, pero lo único que logro fue complicar aún más su situación, ya que a don Seve era eso lo que precisamente más lo calentaban, cogerse a la novia de su hijastro era como ganarse el mayor de los trofeos, con esto pensaba que si el muchacho lograba casarse algún día con la joven, seria gratificante para su ego y virilidad saber que él también se había cogido a la misma hembra incluso primero que él, así que la tomo nuevamente pero ahora por las piernas, le subió el vestido hasta la cintura como si la chica fuera de su total propiedad y sencillamente separo sus muslos con poderío, logrando con esto que a su ardiente mirada quedara en los diminutos calzoncitos blancos que la joven llevaba puestos, mientras ella seguía llorando y suplicando que por favor no se lo hicieran, don Severiano ya claramente enfurecido y caliente hasta la locura le dijo,
--Silencio putaaaaa!!!, yo no te hice venir hasta mi casa para esto!!!, zorra calienteeee!!!!, te callas ahorita mismo o te muelo a bofetadas y a patadas, así que mejor disfrútaloooo!!!, jajajaja!!!! Te aseguro que Rodriguito es un maldito maricon que jamás te culeara como yo lo voy a hacer hoy día, jajajaja!!!!!
Una vez dicho esto último el semental italiano soltó las relucientes piernotas descalzas de Lupita y tomando la diminuta tanga de la chica con sus dos manos la rompió hasta deshacerse de esta dejando al descubierto la ahora desnuda vagina de la colegiala, sin ningún tipo de pudor el viejo poso su desequilibrada mirada en la tierna panocha casi despoblada de pelos, y estando claramente caliente, no dudo en terminar de desnudarla bajándole el vestido por completo y luego hacer lo mismo con su brassier, hasta que por fin la tuvo como él quería… totalmente desnuda.
Don Severiano como pudo se la acomodó poniéndola en la cama de costado para el ubicarse por detrás de ella, la jovencita totalmente temerosa solo se estaba dejando hacer para que no la fueran a zurrar como le habían amenazado.
El caliente vejete a continuación paseo sus manos por su estrecha cintura sintiendo la suavidad enloquecedora de esa juvenil y tersa piel, para luego con sus temblorosas manazas comenzar a recorrerla lentamente por su estómago, para luego ir subiéndolas poco a poco hasta llegar a sus femeninas y bien duras tetitas, recién terminadas en desarrollo, las comenzó a manosear desde su nacimiento recorriéndolas en su totalidad, experimentando y corroborando la dureza de estas tal como él se las había imaginado.
Mientras se las apretaba pero sin llegar a hacerle daño sus lujuriosos ojos no cesaban en ir recorriendo su cuerpo y devorándosela en forma anticipada, las sedosidades que sus toscas manos estaban experimentando en los juveniles senos de la chiquilla amenazaban con hacerlo perder la razón, sus manos, sus ojos y su mente se estaban llenando y saciando de hembra, el viejo ya apoyaba su envarada verga sobre las nalgotas de la nena para comenzar a puntearla poniendo sumo cuidado en no metérsela, quería estar jugando y manoseándola hasta sentirse pleno y satisfecho de tanta carne joven, pero si se empeñaba en que la bella Lupita sintiera y se diera cuenta de la tan dura que la tenía gracias a ella, los movimientos que hacia el viejo eran tan enérgicos que ya daba la impresión de como si verdaderamente ya se la estuviese culeando, las suavidades de aquella monumental jovencita lo hacían sentirse en el paraíso.
--Te gastas las medias tetas pendeja!, te las voy a chupar hasta dejártelas desinfladas cabrona!! , ya verás lo rico que lo vamos a pasar, jejejeje, le decía y reía el vejete quien ya había comenzado a comerle la oreja que tenía a su disposición, produciéndole a la nena una gratificante oleada de ricos escalofríos que le estaban enervando los sentidos, don Severiano a estas alturas ya le amasaba las tetas casi con devoción, esa atractiva colegiala era toda una Diosa se decía para sus adentros, por lo que comenzó a puntearla con más ímpetu y vigor, quería calentarla a como dé lugar, Lupe ya presentía lo que ocurriría si al vejete se le ocurría darla vuelta y que le diera por chuparle las tetas, por lo que quiso ponerle atajo a lo que su cuerpo ya estaba comenzando a reclamar, si es que podía a estas alturas,
Don Severiano estaba en el séptimo cielo, acariciaba a la nena a manos llenas y en forma lujuriosamente desesperada, no había parte del cuerpo de su joven compañera de cama que el ya no haya explorado, aunque a su vagina la estaba dejando para uso exclusivo de su verga, mientras le chupaba y lamia su oreja este se extrañaba que de a ratos sus manos experimentaban la piel erizada de Lupita quien se encontraba disfrutando de unos desquiciantes escalofríos a la misma vez que ella ya movía su cabeza en forma circular y buscando con su oído ensalivado la experta lengua que por segunda vez la estaban haciendo perder la razón, el vejete al caer en cuenta de esto supo al instante que desde aquí en adelante quizás la cosa se pondría más sabrosona, rápidamente tomo una de las blancas manitas de la jovencita y la llevo para que le agarrara su pulsante barra de carne caliente, Lupita cerro sus ojos e inclino su cabeza hacia atrás, para comenzar a tantear casi con delicadeza esa gruesa y caliente estaca de carne llena de nervios que por más que intento en recorrerla o circundarla no lo pudo lograr.
--Ay don Seve… por favor… no... no... no por favor... no me haga esto… déjeme… déjemeeee... decía la caliente pendeja sin ser capaz de soltarle la verga al viejo y ya siendo ella misma quien empujaba su trasero hacia atrás, su respiración ya acusaba el lamentable estado de semi-excitacion en cual se encontraba, el astuto viejo atento a la jugada como pudo la dio vuelta quedando de frente a ella.

La lengua y los labios del viejo que en esos momentos lamian las perfumadas carnes del cuello y hombro de la chica se fueron desplazando hasta llegar y colarse al interior de la deliciosa y fresca boca de Lupe, prácticamente se la estaba devorando bucalmente, mientras de la misma forma el viejo continuaba con sus morbosos manoseos, fue bajando con estas hasta que la agarro nuevamente por la nalgas y la atrajo hacia el para qué sintiera como su virilidad se comprimía con las suavidades de su vientre, mientras su experimentada lengua tras saciarse de las salivas de la nena ahora otra vez recorrían el femenino cuello de la nena otorgándole mares de escalofríos que se acentuaban por los exquisitos cosquilleos que también aportaba el espeso bigote, para luego ir bajando a sus inflamadas tetas que al parecer ya también reclamaban ser succionadas, el vejete sin pensársela dos veces comenzó a chupárselas con ahínco, logrando con esto que la joven tuviera unos excitantes estremecimientos que ya la tenían al borde de la rendición total, su panocha ya era un manantial de líquidos vaginales, así también lo demostraba ella con su respiración acelerada,
Don Severiano no hacía caso a las solicitudes de la tierna hembra solo se daba a seguir comiéndole las tetas, estaba seguro que si la chica ya una vez hasta se había arrodillado ante el por sentirse caliente, en esta nueva ocasión no tenía por qué ser diferente, así que sencillamente solo se daba a seguir succionándole los pezoncitos, como si de verdad fuera a conseguir sacarle leche de las tetas, a la vez que se sentía en la gloria al estar en tales condiciones con tan estupenda hembra, sabía que a esas horas su hijastro aun debía estar en la terminal lo que le daba el tiempo suficiente que para cuando este llegara de regreso el mismo ya estaría disfrutando de su novia.
--Por favor don Seve... ya no... no... no por favor... ya déjeme… déjeme… le pedía la nenota que en su mente ya casi no existían Rodrigo ni don Pedro, ni nadie, solo era ella y esa tremenda verga resbalosa que tenía adosada en su estómago el cual estaba totalmente bañado en las lubricas exudaciones que salían desde la punta de esta.
--Vamos putitaaa… de verdad que no quiero violarte… porque no me das mi regalo de cumpleaños que prometiste que me traerías!?, jejejeje…, le decía mientras movía circularmente el tronco de su verga por sobre la casi lampiña pelvis de Lupita con la intención de que ella entendiera en el acto cual era el tipo de regalo que él estaba reclamando,
EN LA PROXIMA ENTREGA NUESTRA LUPITA Y SU DEGENERADO SUEGRO TENDRAN RELACIONES SEXUALES CONSENTIDAS
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