Nos despertamos con las primeas horas de la mañana, mi madre estaba encima mío, dándome pequeños besos en el pecho.
Carla: buenos días dormilón
Pedro: buenos días mamá, ¿Cómo dormiste?
Carla: Como un bebé, ayer estuvo muy rico.
Pedro: Es que somos muy fogosos
Carla: Se nota que somos compatibles, y cuando te corres dentro mío es tan rico, además te corres tanto que siento que me llenas todo adentro, me has dado los mejores orgasmos que he tenido en mi vida.
Mi erección se apretaba con la panza de mi madre, lo que notaba y movía su cuerpo
Carla: ¿Me vas a dar mi leche matutina amor?
Dicho esto, comenzó a bajar hasta mi polla, agarró la base con una mano y comenzó a darle pequeños besos a la punta, para luego introducírsela lentamente y comenzó a practicarme una mamada espectacular, algunas se la sacaba de la boca para pasar toda su lenga por el largo de mi polla y luego se la volvía a introducir, yo me sentía en cielo.
Pedro: Mamá me harás eyacular si sigues así
Yo trataba de contener mi orgasmo. Mi madre me soltó la polla, se separó de ella y se posicionó encima, colocando la punta en la entrada de su concha, de bajando lentamente hasta que llegue a su cérvix, me comenzó a cabalgar exquisitamente, apoyó sus brazos hacia atrás y sus muslos a mis costados.
Pedro: eres espectacular mamá
Carla solo gemía de placer, más y mas fuerte, yo retorcía mi cuerpo del goce que me estaba produciendo, hacer el amor con mi madre en verdad era espectacular, se movía de manera rítmica, su torso se contorsionaba de atrás para adelante, resaltando sus hermosos senos, los cuales rebotaban, mientras de su boca salían gemidos fuertes .
Pedro: me encanta hacerte el amor mama
Carla: a mi también hijo mío, me encanta sentirte dentro
Sentía que me corría, aumente mi movimiento, provocando otro orgasmo en mi madre, quien se tiro a comerme la boca, yo abrí mis piernas, separando las de ella para follarla más fuerte y correrme lo más profundo en ella, Carla movía mas sus caderas, tratando de ensartarse más mi polla, cuando mi corrida llegó, fue tan intensa que sentía que mis piernas y mi cuerpo en si se entumecía, por su parte mi madre, se retorcía de placer, empujando aún más su pelvis en mi, con cada disparó que daba en su interior, era un nuevo orgasmo que ella tenia. Respiraba de forma pesada en mi oreja, sin decir ninguna palabra, fue tan intenso nuestro orgasmo que nuestros cuerpos no respondían, sin darnos cuenta nos quedamos 5 min dormidos, es en cuando sentimos ruidos de pasos y la voz de mi padre.
José: Llegue, ¿Carla estás por ahí? dejaste toda tu ropa tirada en la cocina.
torpemente tratamos de movernos, lo mas rápido posible pero fue en vano, mi padre llegó mas rápido de lo que pensábamos a la pieza, Carla cerró su piernas por sobre las mías, dejando su cola a la vista, escondiendo el hecho de que yo aún estaba dentro de ella, escurriendo semen de su concha, en eso llega mi padre a la pieza, nos ve y nos pregunta.
Pedro: ¿Durmieron juntos?
Carla: si (mi madre con una voz de miedo), es que ayer vimos una película y nos quedamos dormidos.
Yo no decía nada, estaba totalmente bloqueado
Pedro: ¿y porque están sin ropa?
El frio recorrió nuestros cuerpos, no sabia que responder, pero Carla tomó la palabra, mientras tanto sentía como mi corrida se filtraba desde la concha de mi madre.
Carla: es que hacia calor y bueno, somos madre e hijo ¿o no?
Pedro: me imagino, están todo sudados, bueno, dejaron la ropa tirada en la cocina por si acaso.
Dicho esto, mi padre entro al baño y luego al closet a ponerse más cómodo, mientras nosotros no nos movíamos un milímetro y mi madre chorreando semen desde su concha, mi padre salió del walking closet y nos dijo
José: voy a tomar algo a la cocina, cuidadito los dos
Pedro serio y salio, Carla me miró y me dijo con cara de nervios
Carla: Eso estuvo cerca, ahora anda a tu pieza y dúchate, mientras yo arreglo acá.
No sin antes darme un beso. Partí de inmediato de la pieza, vigilando para no encontrarme con mi padre en el pasillo, me duche y me quede un rato en la pieza. Pasado un rato salí a la cocina a comer, vistiendo algo ligero, mi padre estaba viendo algo en el televisor mientras tomaba un café, en eso llega mi madre a la cocina, con un vestido de pijama. Me miró con cara de caliente.
Carla: cariño, ¿quieres que te prepare unos huevos?
Mi padre dijo que si desde e living, Carla me pidió que la ayudará a sacar algunas cosas de la alacena superior, me acerque y me apoye directamente sobre su cola respingada, y le dije al oído
Pedro: No se vale que me provoques así mamá
Carla: Es para que aprendas a controlarte cuando este tu papa y yo este caliente amor
Pedro: ¿No que no haríamos nada cuando el estuviera en casa?
Carla: si se que lo dije, pero, ¿no te excita?
Obviamente que si, mientras ella trataba de cocer el huevo, le comencé a meter los dedos en su conchita, que aún estaba con algo de semen de la mañana, saque mi polla y se la introduje, follamos tratando de mantener silencio, aunque era difícil, a ella algunas veces se le escapaba un gemido, hasta que no pude más y me volví a correr dentro de ella, lo que le trajo también un nuevo orgasmo, me salí y comenzó a escurrir el semen desde su hermosa concha. Con una voz de sensual y caliente le dice a mi padre
Carla: ahora voy con los huevos
Cuando carla volvió, se puso a ordenar y limpiar el desastre que habíamos dejado, junto con recoger la ropa que habíamos tirado el día anterior, yo mirando impávido, se acerca y me dice
Carla: anda a arreglarte que tienes práctica mas tarde
Sali de la cocina, viendo si mi padre se había dado cuenta de la situación, por suerte no fue así. Me volví a duchar y me arregle para salir, pase toda la tarde fuera de casa, al volver las cosas parecían normales, mis padres habían salido a comer y me dejaron solo. Me fui a acostar.
Al día siguiente todo fue normal, mi madre me dijo por mensaje que no haríamos nada porque le había llegado la regla durante la mañana, lo que obviamente fue un alivio (no estaba embarazada), por lo que estaríamos unas dos semanas sin hacer nada, pero que nada de masturbarme, porque tenia que guardar esa leche para ella cuando ella me indique.
continuará
Carla: buenos días dormilón
Pedro: buenos días mamá, ¿Cómo dormiste?
Carla: Como un bebé, ayer estuvo muy rico.
Pedro: Es que somos muy fogosos
Carla: Se nota que somos compatibles, y cuando te corres dentro mío es tan rico, además te corres tanto que siento que me llenas todo adentro, me has dado los mejores orgasmos que he tenido en mi vida.
Mi erección se apretaba con la panza de mi madre, lo que notaba y movía su cuerpo
Carla: ¿Me vas a dar mi leche matutina amor?
Dicho esto, comenzó a bajar hasta mi polla, agarró la base con una mano y comenzó a darle pequeños besos a la punta, para luego introducírsela lentamente y comenzó a practicarme una mamada espectacular, algunas se la sacaba de la boca para pasar toda su lenga por el largo de mi polla y luego se la volvía a introducir, yo me sentía en cielo.
Pedro: Mamá me harás eyacular si sigues así
Yo trataba de contener mi orgasmo. Mi madre me soltó la polla, se separó de ella y se posicionó encima, colocando la punta en la entrada de su concha, de bajando lentamente hasta que llegue a su cérvix, me comenzó a cabalgar exquisitamente, apoyó sus brazos hacia atrás y sus muslos a mis costados.
Pedro: eres espectacular mamá
Carla solo gemía de placer, más y mas fuerte, yo retorcía mi cuerpo del goce que me estaba produciendo, hacer el amor con mi madre en verdad era espectacular, se movía de manera rítmica, su torso se contorsionaba de atrás para adelante, resaltando sus hermosos senos, los cuales rebotaban, mientras de su boca salían gemidos fuertes .
Pedro: me encanta hacerte el amor mama
Carla: a mi también hijo mío, me encanta sentirte dentro
Sentía que me corría, aumente mi movimiento, provocando otro orgasmo en mi madre, quien se tiro a comerme la boca, yo abrí mis piernas, separando las de ella para follarla más fuerte y correrme lo más profundo en ella, Carla movía mas sus caderas, tratando de ensartarse más mi polla, cuando mi corrida llegó, fue tan intensa que sentía que mis piernas y mi cuerpo en si se entumecía, por su parte mi madre, se retorcía de placer, empujando aún más su pelvis en mi, con cada disparó que daba en su interior, era un nuevo orgasmo que ella tenia. Respiraba de forma pesada en mi oreja, sin decir ninguna palabra, fue tan intenso nuestro orgasmo que nuestros cuerpos no respondían, sin darnos cuenta nos quedamos 5 min dormidos, es en cuando sentimos ruidos de pasos y la voz de mi padre.
José: Llegue, ¿Carla estás por ahí? dejaste toda tu ropa tirada en la cocina.
torpemente tratamos de movernos, lo mas rápido posible pero fue en vano, mi padre llegó mas rápido de lo que pensábamos a la pieza, Carla cerró su piernas por sobre las mías, dejando su cola a la vista, escondiendo el hecho de que yo aún estaba dentro de ella, escurriendo semen de su concha, en eso llega mi padre a la pieza, nos ve y nos pregunta.
Pedro: ¿Durmieron juntos?
Carla: si (mi madre con una voz de miedo), es que ayer vimos una película y nos quedamos dormidos.
Yo no decía nada, estaba totalmente bloqueado
Pedro: ¿y porque están sin ropa?
El frio recorrió nuestros cuerpos, no sabia que responder, pero Carla tomó la palabra, mientras tanto sentía como mi corrida se filtraba desde la concha de mi madre.
Carla: es que hacia calor y bueno, somos madre e hijo ¿o no?
Pedro: me imagino, están todo sudados, bueno, dejaron la ropa tirada en la cocina por si acaso.
Dicho esto, mi padre entro al baño y luego al closet a ponerse más cómodo, mientras nosotros no nos movíamos un milímetro y mi madre chorreando semen desde su concha, mi padre salió del walking closet y nos dijo
José: voy a tomar algo a la cocina, cuidadito los dos
Pedro serio y salio, Carla me miró y me dijo con cara de nervios
Carla: Eso estuvo cerca, ahora anda a tu pieza y dúchate, mientras yo arreglo acá.
No sin antes darme un beso. Partí de inmediato de la pieza, vigilando para no encontrarme con mi padre en el pasillo, me duche y me quede un rato en la pieza. Pasado un rato salí a la cocina a comer, vistiendo algo ligero, mi padre estaba viendo algo en el televisor mientras tomaba un café, en eso llega mi madre a la cocina, con un vestido de pijama. Me miró con cara de caliente.
Carla: cariño, ¿quieres que te prepare unos huevos?
Mi padre dijo que si desde e living, Carla me pidió que la ayudará a sacar algunas cosas de la alacena superior, me acerque y me apoye directamente sobre su cola respingada, y le dije al oído
Pedro: No se vale que me provoques así mamá
Carla: Es para que aprendas a controlarte cuando este tu papa y yo este caliente amor
Pedro: ¿No que no haríamos nada cuando el estuviera en casa?
Carla: si se que lo dije, pero, ¿no te excita?
Obviamente que si, mientras ella trataba de cocer el huevo, le comencé a meter los dedos en su conchita, que aún estaba con algo de semen de la mañana, saque mi polla y se la introduje, follamos tratando de mantener silencio, aunque era difícil, a ella algunas veces se le escapaba un gemido, hasta que no pude más y me volví a correr dentro de ella, lo que le trajo también un nuevo orgasmo, me salí y comenzó a escurrir el semen desde su hermosa concha. Con una voz de sensual y caliente le dice a mi padre
Carla: ahora voy con los huevos
Cuando carla volvió, se puso a ordenar y limpiar el desastre que habíamos dejado, junto con recoger la ropa que habíamos tirado el día anterior, yo mirando impávido, se acerca y me dice
Carla: anda a arreglarte que tienes práctica mas tarde
Sali de la cocina, viendo si mi padre se había dado cuenta de la situación, por suerte no fue así. Me volví a duchar y me arregle para salir, pase toda la tarde fuera de casa, al volver las cosas parecían normales, mis padres habían salido a comer y me dejaron solo. Me fui a acostar.
Al día siguiente todo fue normal, mi madre me dijo por mensaje que no haríamos nada porque le había llegado la regla durante la mañana, lo que obviamente fue un alivio (no estaba embarazada), por lo que estaríamos unas dos semanas sin hacer nada, pero que nada de masturbarme, porque tenia que guardar esa leche para ella cuando ella me indique.
continuará
1 comentários - Traspasando el limite con mi madre IV