_Luego de un tiempo y varias salidas con Mica, de acompañarla hasta la puerta de su casa para asegurarme que no le pase nada en el camino porque aunque su barrio no era del todo peligroso, para llegar tenías que pasar por una zona bastante oscura, con pocas luces, cruzar la ruta ,y hacer un par de cuadras. Y todos sabemos que nunca falta el viejo pajero o borracho que le grita cosas a una chica cuando la ve por la calle sola, entonces para prevenir y evitar que le pase nada malo y saber que llegaba bien, la acompañaba siempre hasta su casa.
Había pasado más o menos un mes y medio desde que empezamos a vernos, estábamos de novios pero aún no conocía a su familia, entonces una noche de camino a su casa me dijo que le había contado a su madre sobre mí, le comentó que estaba conociendo un pibe, también le dijo que era mayor que ella y que queria presentárselo, su madre le dijo que si y Mica me preguntó si estaba de acuerdo en ir a conocer a su familia esa misma noche al llegar a su casa, le respondi obviamente que si aunque en el fondo sentía un poco de nervios y miedo de no caerle bien a la madre.
Seguimos caminando hasta llegar al lugar, ella entró antes para ver si estaba su Mamá y luego salió a buscarme, me agarró de la mano y me comió la boca, yo tuve ganas de seguir el beso pero se alejó unos cm y sonriendo me dijo:
- Ahora no que está mí vieja… Después seguimos…
Y me miró con una carita pícara que me hizo imaginar tantas cosas en un segundo, pero recordé que tenía que conocer a la madre, ella se giró dándome la espalda mientras me llevaba de la mano, y el movimiento de su cadera, esa cinturita, ver cómo se le marcaba toda la cola con ese jean… Era una delicia tener esa vista, por dentro sentía unas ganas de darle unos chirlos bien fuertes y agarrarle las nalgas y apretarlas mientras le besaba y mordía el cuello.
Pero me tuve que aguantar e intenté pensar en cualquier cosa y lo primero que se me vino a la mente fueron motos, para distraer mí cerebro y hacer que mi erección desaparezca porque ya sentía como me empezaba a apretar la verga el boxer, pero por suerte funcionó y al llegar a la puerta ya no se notaba ningún bulto en mí entrepierna.
Mica abre la puerta y entra primero ella, luego me hace pasar y cierro, cuando estoy dirigiendo mí mirada hacia Mica veo a la madre con un cigarrillo encendido viniendo desde la cocina al living, sentí que me clavó una mirada súper seria la vieja y pensé “uh listo, cagué fuego, ahora me raja de una…”. Mí novia se dio cuenta que estaba nervioso entonces ella se acercó a la madre y la saludó, y le dijo:
- Má…este es el chico del que te hablé…
Yo me acerco y digo lo de siempre “Hola, que tal?.. Mucho gusto…” y bla bla bla, nos presentamos normal y nos saludamos con un beso en la mejilla. Luego de eso, la vieja se sienta en la silla mientras sigue fumando y me queda mirando, de nuevo, Mica me dice que nos sentemos en el sillón y cuando terminamos de acomodarnos escucho a la madre diciéndome:
- Y contame que haces de tu vida?...
- Que intenciones tenés con mí Nena?...
Y ahí empezó un interrogatorio prácticamente, le contesté todo lo que me preguntaba mientras Mica me abrazaba con una mano en la cintura y con la otra sujetaba mí mano, y apoyaba su cabeza en mí hombro.
Seguro la madre pensaba que yo no iba a contestar ni la mitad de lo que preguntó pero le respondí todo así le quedaba claro que la hija me importaba y que no estaba solo con ella para sacarme las ganas y después dejarla.
Luego del interrogatorio de la vieja y que Mica le hable de otras cosas para calmar ese ambiente raro que había, habrán pasado 30 min más o menos y entonces veo que la madre se levanta de la silla y al despedirse nos dice:
- Bueno me voy a descansar, ojo con lo que haces Mica y Vos…cuídame la Nena…
Clavándome la mirada, creo que hasta se mordió sus labios levemente, y luego se va a dormir la vieja. Y cuando se está yendo alcanzo a ver cómo era físicamente, no le había prestado mucha atención antes por los nervios, era morocha, pelo negro ondulado largo hasta la cintura y piel morena, no llegaba a medir más de 1,60 , osea era petisa la Suegra.
Para ser madre y tener casi 45 años, se conservaba bastante bien, su cuerpo no parecía fitness pero tenía lindas curvas, tetas más grandes que las de su hija Mica, 120 la medida de tetas quizas y bien culona, osea se puede decir que era la Morocha Argentina en persona la suegrita, parecía la pornstar Pao Rojas pero con un cuerpo natural.
Al fin estábamos solos, Mica y yo, ella se levantó del sillón y se aseguró que la madre se fue a su cuarto y cerró su puerta, mí novia agarró el control de la TV y subió un poco el volumen y mirándome me señaló para que haga silencio “Shhhhh…🤫”.
Luego me dice que la espere, se va a su cuarto y cuando vuelve tenía puesta una calza negra que hacía resaltar sus piernas y se ajustaba a su culo redondo y perfecto, hasta le marcaba los labios de su vagina levemente, se veía muy sexy con ese outfit.
Mica se acerca a mí, se sienta sobre mis piernas, la abracé fuerte de su cintura, no se porque pero me encantaba abrazarla así, ella posó su frente en la mía y sus manos en mís mejillas, y en voz baja dijo:
- Ahora si…sigamos en lo que estábamos antes…
Mirándome a los ojos y con una sonrisa cómplice, rozamos nuestros labios y empezamos a besarnos, fue tierno e intenso a la vez, unos besitos y otros besasos largos con mordidas incluidas, ella por momentos lamía mis labios, la seguí y nuestros besos se intercalaban con una danza de nuestras lenguas entrelazadas.
Mientras la abrazaba y presionaba contra mí, podía sentir sus tetas apoyadas en mí pecho, sentir el roce de sus pezones que ya estaban erectos, uffff eso me voló la cabeza, sentía ganas de bajarle el top y comerle las tetas ahí mismo, me moría por bajarle la calza, correrle la tanguita y hacer que me coja a sentones la pendeja.
Esa lluvia de besos, la pasión que sentíamos en ese momento, tuvo efecto en ambos, ella se mordía sus labios mientras le besaba el cuello y le daba mordiditas, incluso podía oírla gemir levemente, escucharla así me puso la pija al palo, podía sentir mí verga totalmente erecta bajando por mí pierna izquierda.
En el fondo sentía un poco de vergüenza que ella sintiera eso, pero por otro lado tenía unas ganas de hacerla mía y cogerla en ese sillón, de chuparle la conchita, de tocarla hasta que se moje completamente y hacerla acabar, quería ponerla de rodillas y que chupe mí verga y acabarle en su boquita, ver cómo se tragaba toda mí leche la pendeja trola.
Me excitaba mucho el hecho de saber que la Madre estaba en otra habitación y podía escucharnos o vernos si venía al living… Esa mezcla de calentura por Mica, sus besos, tenerla sobre mis piernas y sentir su culo aplastando mí verga erecta, y además el morbo y adrenalina de que la vieja nos vea me ponía la pija más dura todavía.
Ella se dio cuenta, no me lo dijo directamente pero lo insinuó:
- Ufff…Amor cómo estás hoy!!!...
Mientras me mordía los labios, podía sentir sus uñas recorriéndome la espalda, con mí mano libre empecé a acariciar sus piernas, desde la rodilla hacia arriba hasta unos cm de distancia de su entrepierna, quería que se diera cuenta que la deseaba y también excitarla, calentarla con el roce de mis dedos...
Y funcionaba porque ella apretaba sus piernas, podía sentir como contraía sus músculos en respuesta a mis caricias, su respiración más agitada e intensa, sentir su pulso más acelerado, era obvio que la pendeja estaba igual de caliente que yo, que se moría de ganas de cogerme en el sillón…
De repente deja de besarme, se aleja y lentamente se pone de pie. Me miraba con una ternura y calentura al mismo tiempo, me pone su mano en el pecho y me empuja haciendo que mí espalda se apoye del todo en el sillón. Luego empuja mis pies y me cierra un poco las piernas, mirándome a los ojos me sujeta de las manos y se sube encima mio.
Ella mueve su cintura y se acomoda, dejando su conchita justo encima de mí verga, eso me causó una erección más intensa de la que ya tenía, me puso la pija re dura. Mica lo sintió y me apretó las manos, tenía sus pechos a solo centímetros de mí cara y al sentir mí erección se inclino hacia mí y me comió la boca.
La abracé fuerte de la cintura, presionandola contra mí cuerpo, y segundos después rozando con mis dedos su espalda llevé mis manos hacia su cola. La acaricie, le di unos chirlos y luego empecé a masajear ese culo hermoso que tenía, por momentos apretaba fuerte sus nalgas, podía sentir como su respiración se hacía más intensa al igual que sus besos y mordidas.
Ella movía sus caderas haciendo que su conchita se frote en mí verga, sentir su vagina me volvió loco, eso me hizo perder el control, mientras seguía disfrutando de su culo, con la otra mano la sujete del pelo y jale su cabeza hacia atrás, su espalda quedó arqueada dejando sus tetas rozando mis labios, las mordí por encima de su top, eso la volvió loca.
Mica me agarró de los pelos y empezó a frotarme sus pechos en mí cara. Deje su culo y con ambas manos agarre sus tetas, las apreté y mientras las presionaba con mis dedos pulgares acariciaba sus pezones dibujando círculos, ella gemía, y luego se acerca a mí y me susurra:
- Amor…quiero que me chupes las tetas… Ya…
Y vi como ella se bajó el top dejando sus tetas al aire, me miró y se mordió los labios, puse mis manos en sus pechos, era tan suave su piel, sus pezones erizados, las apreté tiernamente y comencé a lamer una de sus tetas, acaricie su pezón con mis labios, luego lo bese, me dirigí a su otra teta, la apreté con mí mano y empecé a chupar su pezón, mientras lo hacía con mí lengua lo lamía y acariciaba, ella gemía más y más, me tenía agarrado de los pelos y me presionaba contra sus pechos.
Al mismo tiempo, podía sentir el movimiento de su pelvis sobre mí entrepierna, me hacía sentir que me estaba cogiendo con ropa, por dentro me moría de ganas de agarrar su calza y desgarrarla toda y empezar a penetrarla y hacerla mía.
En ese momento, ambos estabamos muy calientes y nos dejamos llevar.
Ella me miraba a los ojos mientras movía su cadera y me frotaba la verga, gemía y me clavaba las uñas en mí pecho, mientras yo seguía deleitándome con sus tetas, las besaba y mordía. Luego las agarre con ambas manos y mientras las presionaba comencé a lamer y chupar sus pezones, los besaba y le daba chupetones, a continuación ella puso sus manos sobre las mías y presionaba mientras le masajeaba sus pechos y los acariciaba con el leve roce mis labios.
Luego de varios minutos, ella se acerco a mí, dejando sus tetas totalmente apoyadas en mí pecho, podía sentir el ritmo de sus latidos acelerados y su respiración más agitada.
Comenzó a besarme de manera tierna, la abracé fuerte de su cintura dejando su ombligo junto al mío, y ella poco a poco fue subiendo de niveles con sus besos, mientras yo con mí mano libre me dirigí a su cola y empecé a acariciar y masajearla, por momentos apretaba fuerte y luego levemente, le daba chirlos y volvía a acariciarla. A continuación la tomé de las manos mientras nos besábamos con intensidad…
Luego volví a abrazarme a su espalda a la altura de su cintura con ambas manos, y mientras nos mirábamos directo a los ojos, comencé a mover mí pelvis lentamente y con delicadeza frotaba mí pija en su vagina, podía sentir sus labios envolviendo mí verga y recorriendola varios cm.
Ella gemía tiernamente mientras me miraba y mordía sus labios, seguí moviéndome hasta sentir un ligero temblor en sus piernas y como luego su humedad me invadía.
Ella me besó con ternura, mordió mis labios y mirándome a los ojos dijo “Te Quiero…”, luego posó su cabeza en mí pecho, continúe acariciando su espalda y la abrace fuerte.
Estábamos tan cerca, en ese punto ya no hacía falta penetrarla para sentir que era mía y que yo era suyo…
Era como si nuestros cuerpos se hubieran creado para encajar a la perfección…
Estabamos conectados de una manera que ninguna palabra podía describirlo, era algo etéreo.
Luego nos quedamos así casi una hora, ella encima mio, abrazándonos, dándole besos en su frente, mirándonos, ella robándome besos, hasta quedarnos dormidos…
Nos despertamos 2 horas después, ya era muy tarde, entonces me tenía que ir rápido, ella se acomodó la ropa, le robe unos besos, nos levantamos y luego me acompaño a la puerta y nos despedimos con un abrazo y varios besos más.
CONTINUARÁ…
Había pasado más o menos un mes y medio desde que empezamos a vernos, estábamos de novios pero aún no conocía a su familia, entonces una noche de camino a su casa me dijo que le había contado a su madre sobre mí, le comentó que estaba conociendo un pibe, también le dijo que era mayor que ella y que queria presentárselo, su madre le dijo que si y Mica me preguntó si estaba de acuerdo en ir a conocer a su familia esa misma noche al llegar a su casa, le respondi obviamente que si aunque en el fondo sentía un poco de nervios y miedo de no caerle bien a la madre.
Seguimos caminando hasta llegar al lugar, ella entró antes para ver si estaba su Mamá y luego salió a buscarme, me agarró de la mano y me comió la boca, yo tuve ganas de seguir el beso pero se alejó unos cm y sonriendo me dijo:
- Ahora no que está mí vieja… Después seguimos…
Y me miró con una carita pícara que me hizo imaginar tantas cosas en un segundo, pero recordé que tenía que conocer a la madre, ella se giró dándome la espalda mientras me llevaba de la mano, y el movimiento de su cadera, esa cinturita, ver cómo se le marcaba toda la cola con ese jean… Era una delicia tener esa vista, por dentro sentía unas ganas de darle unos chirlos bien fuertes y agarrarle las nalgas y apretarlas mientras le besaba y mordía el cuello.
Pero me tuve que aguantar e intenté pensar en cualquier cosa y lo primero que se me vino a la mente fueron motos, para distraer mí cerebro y hacer que mi erección desaparezca porque ya sentía como me empezaba a apretar la verga el boxer, pero por suerte funcionó y al llegar a la puerta ya no se notaba ningún bulto en mí entrepierna.
Mica abre la puerta y entra primero ella, luego me hace pasar y cierro, cuando estoy dirigiendo mí mirada hacia Mica veo a la madre con un cigarrillo encendido viniendo desde la cocina al living, sentí que me clavó una mirada súper seria la vieja y pensé “uh listo, cagué fuego, ahora me raja de una…”. Mí novia se dio cuenta que estaba nervioso entonces ella se acercó a la madre y la saludó, y le dijo:
- Má…este es el chico del que te hablé…
Yo me acerco y digo lo de siempre “Hola, que tal?.. Mucho gusto…” y bla bla bla, nos presentamos normal y nos saludamos con un beso en la mejilla. Luego de eso, la vieja se sienta en la silla mientras sigue fumando y me queda mirando, de nuevo, Mica me dice que nos sentemos en el sillón y cuando terminamos de acomodarnos escucho a la madre diciéndome:
- Y contame que haces de tu vida?...
- Que intenciones tenés con mí Nena?...
Y ahí empezó un interrogatorio prácticamente, le contesté todo lo que me preguntaba mientras Mica me abrazaba con una mano en la cintura y con la otra sujetaba mí mano, y apoyaba su cabeza en mí hombro.
Seguro la madre pensaba que yo no iba a contestar ni la mitad de lo que preguntó pero le respondí todo así le quedaba claro que la hija me importaba y que no estaba solo con ella para sacarme las ganas y después dejarla.
Luego del interrogatorio de la vieja y que Mica le hable de otras cosas para calmar ese ambiente raro que había, habrán pasado 30 min más o menos y entonces veo que la madre se levanta de la silla y al despedirse nos dice:
- Bueno me voy a descansar, ojo con lo que haces Mica y Vos…cuídame la Nena…
Clavándome la mirada, creo que hasta se mordió sus labios levemente, y luego se va a dormir la vieja. Y cuando se está yendo alcanzo a ver cómo era físicamente, no le había prestado mucha atención antes por los nervios, era morocha, pelo negro ondulado largo hasta la cintura y piel morena, no llegaba a medir más de 1,60 , osea era petisa la Suegra.
Para ser madre y tener casi 45 años, se conservaba bastante bien, su cuerpo no parecía fitness pero tenía lindas curvas, tetas más grandes que las de su hija Mica, 120 la medida de tetas quizas y bien culona, osea se puede decir que era la Morocha Argentina en persona la suegrita, parecía la pornstar Pao Rojas pero con un cuerpo natural.
Al fin estábamos solos, Mica y yo, ella se levantó del sillón y se aseguró que la madre se fue a su cuarto y cerró su puerta, mí novia agarró el control de la TV y subió un poco el volumen y mirándome me señaló para que haga silencio “Shhhhh…🤫”.
Luego me dice que la espere, se va a su cuarto y cuando vuelve tenía puesta una calza negra que hacía resaltar sus piernas y se ajustaba a su culo redondo y perfecto, hasta le marcaba los labios de su vagina levemente, se veía muy sexy con ese outfit.
Mica se acerca a mí, se sienta sobre mis piernas, la abracé fuerte de su cintura, no se porque pero me encantaba abrazarla así, ella posó su frente en la mía y sus manos en mís mejillas, y en voz baja dijo:
- Ahora si…sigamos en lo que estábamos antes…
Mirándome a los ojos y con una sonrisa cómplice, rozamos nuestros labios y empezamos a besarnos, fue tierno e intenso a la vez, unos besitos y otros besasos largos con mordidas incluidas, ella por momentos lamía mis labios, la seguí y nuestros besos se intercalaban con una danza de nuestras lenguas entrelazadas.
Mientras la abrazaba y presionaba contra mí, podía sentir sus tetas apoyadas en mí pecho, sentir el roce de sus pezones que ya estaban erectos, uffff eso me voló la cabeza, sentía ganas de bajarle el top y comerle las tetas ahí mismo, me moría por bajarle la calza, correrle la tanguita y hacer que me coja a sentones la pendeja.
Esa lluvia de besos, la pasión que sentíamos en ese momento, tuvo efecto en ambos, ella se mordía sus labios mientras le besaba el cuello y le daba mordiditas, incluso podía oírla gemir levemente, escucharla así me puso la pija al palo, podía sentir mí verga totalmente erecta bajando por mí pierna izquierda.
En el fondo sentía un poco de vergüenza que ella sintiera eso, pero por otro lado tenía unas ganas de hacerla mía y cogerla en ese sillón, de chuparle la conchita, de tocarla hasta que se moje completamente y hacerla acabar, quería ponerla de rodillas y que chupe mí verga y acabarle en su boquita, ver cómo se tragaba toda mí leche la pendeja trola.
Me excitaba mucho el hecho de saber que la Madre estaba en otra habitación y podía escucharnos o vernos si venía al living… Esa mezcla de calentura por Mica, sus besos, tenerla sobre mis piernas y sentir su culo aplastando mí verga erecta, y además el morbo y adrenalina de que la vieja nos vea me ponía la pija más dura todavía.
Ella se dio cuenta, no me lo dijo directamente pero lo insinuó:
- Ufff…Amor cómo estás hoy!!!...
Mientras me mordía los labios, podía sentir sus uñas recorriéndome la espalda, con mí mano libre empecé a acariciar sus piernas, desde la rodilla hacia arriba hasta unos cm de distancia de su entrepierna, quería que se diera cuenta que la deseaba y también excitarla, calentarla con el roce de mis dedos...
Y funcionaba porque ella apretaba sus piernas, podía sentir como contraía sus músculos en respuesta a mis caricias, su respiración más agitada e intensa, sentir su pulso más acelerado, era obvio que la pendeja estaba igual de caliente que yo, que se moría de ganas de cogerme en el sillón…
De repente deja de besarme, se aleja y lentamente se pone de pie. Me miraba con una ternura y calentura al mismo tiempo, me pone su mano en el pecho y me empuja haciendo que mí espalda se apoye del todo en el sillón. Luego empuja mis pies y me cierra un poco las piernas, mirándome a los ojos me sujeta de las manos y se sube encima mio.
Ella mueve su cintura y se acomoda, dejando su conchita justo encima de mí verga, eso me causó una erección más intensa de la que ya tenía, me puso la pija re dura. Mica lo sintió y me apretó las manos, tenía sus pechos a solo centímetros de mí cara y al sentir mí erección se inclino hacia mí y me comió la boca.
La abracé fuerte de la cintura, presionandola contra mí cuerpo, y segundos después rozando con mis dedos su espalda llevé mis manos hacia su cola. La acaricie, le di unos chirlos y luego empecé a masajear ese culo hermoso que tenía, por momentos apretaba fuerte sus nalgas, podía sentir como su respiración se hacía más intensa al igual que sus besos y mordidas.
Ella movía sus caderas haciendo que su conchita se frote en mí verga, sentir su vagina me volvió loco, eso me hizo perder el control, mientras seguía disfrutando de su culo, con la otra mano la sujete del pelo y jale su cabeza hacia atrás, su espalda quedó arqueada dejando sus tetas rozando mis labios, las mordí por encima de su top, eso la volvió loca.
Mica me agarró de los pelos y empezó a frotarme sus pechos en mí cara. Deje su culo y con ambas manos agarre sus tetas, las apreté y mientras las presionaba con mis dedos pulgares acariciaba sus pezones dibujando círculos, ella gemía, y luego se acerca a mí y me susurra:
- Amor…quiero que me chupes las tetas… Ya…
Y vi como ella se bajó el top dejando sus tetas al aire, me miró y se mordió los labios, puse mis manos en sus pechos, era tan suave su piel, sus pezones erizados, las apreté tiernamente y comencé a lamer una de sus tetas, acaricie su pezón con mis labios, luego lo bese, me dirigí a su otra teta, la apreté con mí mano y empecé a chupar su pezón, mientras lo hacía con mí lengua lo lamía y acariciaba, ella gemía más y más, me tenía agarrado de los pelos y me presionaba contra sus pechos.
Al mismo tiempo, podía sentir el movimiento de su pelvis sobre mí entrepierna, me hacía sentir que me estaba cogiendo con ropa, por dentro me moría de ganas de agarrar su calza y desgarrarla toda y empezar a penetrarla y hacerla mía.
En ese momento, ambos estabamos muy calientes y nos dejamos llevar.
Ella me miraba a los ojos mientras movía su cadera y me frotaba la verga, gemía y me clavaba las uñas en mí pecho, mientras yo seguía deleitándome con sus tetas, las besaba y mordía. Luego las agarre con ambas manos y mientras las presionaba comencé a lamer y chupar sus pezones, los besaba y le daba chupetones, a continuación ella puso sus manos sobre las mías y presionaba mientras le masajeaba sus pechos y los acariciaba con el leve roce mis labios.
Luego de varios minutos, ella se acerco a mí, dejando sus tetas totalmente apoyadas en mí pecho, podía sentir el ritmo de sus latidos acelerados y su respiración más agitada.
Comenzó a besarme de manera tierna, la abracé fuerte de su cintura dejando su ombligo junto al mío, y ella poco a poco fue subiendo de niveles con sus besos, mientras yo con mí mano libre me dirigí a su cola y empecé a acariciar y masajearla, por momentos apretaba fuerte y luego levemente, le daba chirlos y volvía a acariciarla. A continuación la tomé de las manos mientras nos besábamos con intensidad…
Luego volví a abrazarme a su espalda a la altura de su cintura con ambas manos, y mientras nos mirábamos directo a los ojos, comencé a mover mí pelvis lentamente y con delicadeza frotaba mí pija en su vagina, podía sentir sus labios envolviendo mí verga y recorriendola varios cm.
Ella gemía tiernamente mientras me miraba y mordía sus labios, seguí moviéndome hasta sentir un ligero temblor en sus piernas y como luego su humedad me invadía.
Ella me besó con ternura, mordió mis labios y mirándome a los ojos dijo “Te Quiero…”, luego posó su cabeza en mí pecho, continúe acariciando su espalda y la abrace fuerte.
Estábamos tan cerca, en ese punto ya no hacía falta penetrarla para sentir que era mía y que yo era suyo…
Era como si nuestros cuerpos se hubieran creado para encajar a la perfección…
Estabamos conectados de una manera que ninguna palabra podía describirlo, era algo etéreo.
Luego nos quedamos así casi una hora, ella encima mio, abrazándonos, dándole besos en su frente, mirándonos, ella robándome besos, hasta quedarnos dormidos…
Nos despertamos 2 horas después, ya era muy tarde, entonces me tenía que ir rápido, ella se acomodó la ropa, le robe unos besos, nos levantamos y luego me acompaño a la puerta y nos despedimos con un abrazo y varios besos más.
CONTINUARÁ…
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