Era una tarde de verano, de mucho calor…yo trabajo en horario cortado, llegue muy cansada al medio día, después de una mañana agotadora de trabajo y me disponía a dormir una buena siesta para recuperarme y volver al trabajo; estaba sola en casa mi ya que mi marido estaba en el trabajo, así que no almorcé, me di una ducha y me puse ropa de cama (un camisón corto, y una tanguita). Ya mas relajada me acuesto cuando voy entrando en sueño, comienzo a sentir golpes, como que alguien estaba martillando. Decidí esperar a ver si terminaba, pero el ruido se hacia cada vez mas fuerte, mis nervios estaban a punto de explotar, así que me levante y mire por la ventana para ver de donde venia el ruido, se trataba de dos obreros poniendo una media sombra para el patio del edificio.
Baje como una luz, muy enojada porque consideraba que no era un horario para hacer ruido, ya que la mayoría de la gente duerme. Veo a estos dos obreros trabajando abajo del sol, con un calor impresionante, uno de unos 45 años panzon, canoso y todo sudado; el otro de unos 39 aproximadamente, mas alto, mas corpulento, también en las mismas condiciones del primero, todos sucio y sudado cosa que me da mucho asco.
En tono muy enojada les digo:
- Me parece que este no es horario para hacer ruido, la gente duerme..
El obrero mayor que era el que mandaba me dice:
- Señora no se altere que estamos haciendo nuestro trabajo.
- Pero yo estoy durmiendo y no creo que este sea el horario, insisto! (casi gritando)
El el jefe le dice mira vamos a hacer algo, yo a la señora la conozco, así que voy a mostrarle el papel con el cual nos autorizan a trabajar.
(Ese viejo verde ya me había dicho varias veces guasadas, y barbaridades, por eso dijo que me conocía)
Así que se fue para el fondo, donde estaba la casilla de herramientas, no sin antes, hacerles una mirada muy compinche al otro obrero que estaba con el. Claro que en ese momento no entendí por que eran.
Mientras tanto el me quede con el obrero mas joven me ofreció agua, ya que el calor era insoportable, yo temblaba de la furia, así que me volqué agua encima, el camisón me quedo casi transparente, se me notaban mis pechos, y me tape con las dos manos, al joven se le iban los ojos.
Al rato escucho que me grita el viejo desde el fondo:
-Señora puede venir un momento?
Yo me dirijo hacia el fondo al ese cuarto de herramientas y el joven venia detrás de mi.
Una vez que entro (algo temerosa), lo veo al viejo con un papel en la mano y me dice:
_Acá esta la autorización señora, venga no tenga miedo y mírela.
Cuando entro y agarro el papel siento como cierran la puerta con candado, y comienzan a reírse…
El viejo le dice al joven: esta es la putita que siempre te hablo que me calienta la pija.
Yo me quede helada, y comencé a temblar, mire para todos lados para ver que podía agarrar para pégales y defenderme, pero las herramientas estaban colgadas en un tablero o estaban lejos. Veo que se me van acercando, y les digo:
-Por favor no me hagan nada, les pido disculpas no quise gritarles..
Entre los dos me agarraron, el viejo se sentó, y me puso boca abajo sobre su falda, y me decía, vas a ver putita que ahora no le vas a gritar mas a nadie, me sube el camisón y me baja la tanga y comienza a darme nalgadas muy fuertes y me amasaba el culo, yo pegaba gritos, me resistía, me movía, pero veía que no podía hacer nada, solo podía llorar…el viejo le dice al otro, llenale la boca a la puta para que no chille, en eso saca su pija, era normal, pero bastante gorda, y comienza a violarme la boca, me la metía hasta la garganta, yo me ahogaba me daba arcadas, pero el me agarraba de los pelos, mientras el otro me seguía pegando y se reía.
En un momento dejo de pegarme y comenzó a meter sus dedos por mi conchita, yo me retorcía, así que le dijo al joven que me llene de leche la boca, y este le dice, menos mal jefe por que ya no aguantaba mas…en ese momento sentí como todo el semen invadía mi boca, hasta mi garganta y me dice, tómatelo todo puta, vas a aprender a obedecer y la tome. Dale puta ahora me la vas a dejar limpita, traga todo ni una gota quiero!
Yo quede cansada, pero esto recién comenzaba.
El viejo me tiro al piso, y me dijo que me pusiera en cuatro patas, como una perrita, yo temblaba, pero no podía hacer nada.
El mas joven se tira al piso y desde abajo comienza a mamarme las tetas, muy fuerte me dolía y gritaba, el viejo me pego una cachetada, me dijo:
Puta cerra la boca o lo vas a lamentar.
Luego me metió la mano en mi conchita, que reaccionaba ante tanto estimulo, y me metió salvajemente 4 dedos, y me dice…uh que puta barata sos, te estas mojando, te gusta eh.
Yo no podía creer lo que estaba viviendo, el viejo me tocaba el clítoris sin parar, estaba toda dolorida, el otro me destrozaba las tetas.
El viejo saco la mano y me metió sin miramientos su pija grande, mi lubricación era mínima, y grite mucho, entonces me tomo del pelo fuerte, y me dijo ahora si vas a gritar puta de mierda, la saco y me la metió por mi culo que hasta ese momento era virgen., y el joven se acerco y me la metió por mi conchita, tenia las dos pijas adentros, metidas brutalmente, pero no tenia mas fuerzas, solo rogaba que acaben para que termine esta pesadilla.
Cuando ya sentí que sus pijas se inflaban para llenarme de leche por mis dos agujeros, los dos la sacan y me dice el joven, ahora vas a tomar leche, mucha leche pendeja puta.
Me metieron la dos pijas, pero no tengo una boca muy grande, así que me ahogaba, y alternaban, hasta que primero el joven largo su leche nuevamente y me la tuve que tragar toda, un asco terrible, pese que no podía resistirlo, y me cerro la boca y me obligo a tragar, el viejo seguía masturbándose, mientras tanto. Cuando termine con el joven, el viejo me dice, ahora si puta, el momento que tanto espere, trágatela toda toma!...si miramientos me la largo, tenia un montón de leche acumulada y yo ya no daba mas, comencé a tener arcadas del asco, y me volvió a cerrar la boca…trágala, si a vos te gusta calentar la pija este es el resultado…y me dejaron tirada ahí, creo que por unos minutos perdí el conocimiento.
Cuando abro los ojos, los veo a los dos sentados en el piso, tomando una cerveza, no tenia idea del tiempo..me levanto como puedo y me quiero ir, y el más joven me agarra y me dice espera, el viejo cómodamente sentado me dice: entendiste que de ahora en mas vas a ser mi puta no? Te voy a coger cuando yo quiera, y con el obrero que yo elija, así que prepárate que esto no termina, a menos que prefieras que tu marido sepa que chupas otras pijas, le puedo inventar lo que yo quiera. jajajajaja.
Baje como una luz, muy enojada porque consideraba que no era un horario para hacer ruido, ya que la mayoría de la gente duerme. Veo a estos dos obreros trabajando abajo del sol, con un calor impresionante, uno de unos 45 años panzon, canoso y todo sudado; el otro de unos 39 aproximadamente, mas alto, mas corpulento, también en las mismas condiciones del primero, todos sucio y sudado cosa que me da mucho asco.
En tono muy enojada les digo:
- Me parece que este no es horario para hacer ruido, la gente duerme..
El obrero mayor que era el que mandaba me dice:
- Señora no se altere que estamos haciendo nuestro trabajo.
- Pero yo estoy durmiendo y no creo que este sea el horario, insisto! (casi gritando)
El el jefe le dice mira vamos a hacer algo, yo a la señora la conozco, así que voy a mostrarle el papel con el cual nos autorizan a trabajar.
(Ese viejo verde ya me había dicho varias veces guasadas, y barbaridades, por eso dijo que me conocía)
Así que se fue para el fondo, donde estaba la casilla de herramientas, no sin antes, hacerles una mirada muy compinche al otro obrero que estaba con el. Claro que en ese momento no entendí por que eran.
Mientras tanto el me quede con el obrero mas joven me ofreció agua, ya que el calor era insoportable, yo temblaba de la furia, así que me volqué agua encima, el camisón me quedo casi transparente, se me notaban mis pechos, y me tape con las dos manos, al joven se le iban los ojos.
Al rato escucho que me grita el viejo desde el fondo:
-Señora puede venir un momento?
Yo me dirijo hacia el fondo al ese cuarto de herramientas y el joven venia detrás de mi.
Una vez que entro (algo temerosa), lo veo al viejo con un papel en la mano y me dice:
_Acá esta la autorización señora, venga no tenga miedo y mírela.
Cuando entro y agarro el papel siento como cierran la puerta con candado, y comienzan a reírse…
El viejo le dice al joven: esta es la putita que siempre te hablo que me calienta la pija.
Yo me quede helada, y comencé a temblar, mire para todos lados para ver que podía agarrar para pégales y defenderme, pero las herramientas estaban colgadas en un tablero o estaban lejos. Veo que se me van acercando, y les digo:
-Por favor no me hagan nada, les pido disculpas no quise gritarles..
Entre los dos me agarraron, el viejo se sentó, y me puso boca abajo sobre su falda, y me decía, vas a ver putita que ahora no le vas a gritar mas a nadie, me sube el camisón y me baja la tanga y comienza a darme nalgadas muy fuertes y me amasaba el culo, yo pegaba gritos, me resistía, me movía, pero veía que no podía hacer nada, solo podía llorar…el viejo le dice al otro, llenale la boca a la puta para que no chille, en eso saca su pija, era normal, pero bastante gorda, y comienza a violarme la boca, me la metía hasta la garganta, yo me ahogaba me daba arcadas, pero el me agarraba de los pelos, mientras el otro me seguía pegando y se reía.
En un momento dejo de pegarme y comenzó a meter sus dedos por mi conchita, yo me retorcía, así que le dijo al joven que me llene de leche la boca, y este le dice, menos mal jefe por que ya no aguantaba mas…en ese momento sentí como todo el semen invadía mi boca, hasta mi garganta y me dice, tómatelo todo puta, vas a aprender a obedecer y la tome. Dale puta ahora me la vas a dejar limpita, traga todo ni una gota quiero!
Yo quede cansada, pero esto recién comenzaba.
El viejo me tiro al piso, y me dijo que me pusiera en cuatro patas, como una perrita, yo temblaba, pero no podía hacer nada.
El mas joven se tira al piso y desde abajo comienza a mamarme las tetas, muy fuerte me dolía y gritaba, el viejo me pego una cachetada, me dijo:
Puta cerra la boca o lo vas a lamentar.
Luego me metió la mano en mi conchita, que reaccionaba ante tanto estimulo, y me metió salvajemente 4 dedos, y me dice…uh que puta barata sos, te estas mojando, te gusta eh.
Yo no podía creer lo que estaba viviendo, el viejo me tocaba el clítoris sin parar, estaba toda dolorida, el otro me destrozaba las tetas.
El viejo saco la mano y me metió sin miramientos su pija grande, mi lubricación era mínima, y grite mucho, entonces me tomo del pelo fuerte, y me dijo ahora si vas a gritar puta de mierda, la saco y me la metió por mi culo que hasta ese momento era virgen., y el joven se acerco y me la metió por mi conchita, tenia las dos pijas adentros, metidas brutalmente, pero no tenia mas fuerzas, solo rogaba que acaben para que termine esta pesadilla.
Cuando ya sentí que sus pijas se inflaban para llenarme de leche por mis dos agujeros, los dos la sacan y me dice el joven, ahora vas a tomar leche, mucha leche pendeja puta.
Me metieron la dos pijas, pero no tengo una boca muy grande, así que me ahogaba, y alternaban, hasta que primero el joven largo su leche nuevamente y me la tuve que tragar toda, un asco terrible, pese que no podía resistirlo, y me cerro la boca y me obligo a tragar, el viejo seguía masturbándose, mientras tanto. Cuando termine con el joven, el viejo me dice, ahora si puta, el momento que tanto espere, trágatela toda toma!...si miramientos me la largo, tenia un montón de leche acumulada y yo ya no daba mas, comencé a tener arcadas del asco, y me volvió a cerrar la boca…trágala, si a vos te gusta calentar la pija este es el resultado…y me dejaron tirada ahí, creo que por unos minutos perdí el conocimiento.
Cuando abro los ojos, los veo a los dos sentados en el piso, tomando una cerveza, no tenia idea del tiempo..me levanto como puedo y me quiero ir, y el más joven me agarra y me dice espera, el viejo cómodamente sentado me dice: entendiste que de ahora en mas vas a ser mi puta no? Te voy a coger cuando yo quiera, y con el obrero que yo elija, así que prepárate que esto no termina, a menos que prefieras que tu marido sepa que chupas otras pijas, le puedo inventar lo que yo quiera. jajajajaja.
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