Fin de semana en Rosario I (Viernes delirante)

Víctor, mi primo, me invitaba a quedarme unos días en Rosario, hacia bastante que no lo veía personalmente y como siempre me lleve de forma excelente con el me propuse seriamente a pasar un fin de semana a pura joda como suponía que iba a ser. Era difícil con los horarios de laburo que manejo pero quiso la suerte que se alinearan los astros; horas adeudadas por mis compañeros, novia furiosamente enojada por sospechosos mensajes de textos y algo de plata que saque en la quiniela. Hable con mi primo y le dije; “ Víctor esperame, en la terminal que voy para allá en un par de horas, todo el finde de joda espero”, a lo que me respondió “ni lo dudes” y nos pusimos de acuerdo con el horario. Viernes 18.30 hs llegue a Rosario y comenzaban las sorpresas y el puterío.
Recordaba que Víctor tenia una novia despampanante, un pendejon de 20 años que partía la tierra, mi objetivo cuando hable con mi primo era saber si seguía con esa mina y lo mas importante, conocer sus amigas.
- Que haces primo tanto tiempo! Al final me hice un tiempo y me vine – le dije cuando lo vi.
- Por fin! Hace como dos años que sabemos muy poco de cada uno, ahora nos ponemos al día.
Después de la terminal pasamos a comprar para hacer unos pollos al horno, dado que había invitado a unos amigos a su casa como lo hacían todos los viernes y luego encaramos para un edificio a unas cuatro cuadras del parque independencia.
- y Florencia? Así se llamaba tu novia no? Como va la cosa?- ya empecé a indagarle
- y con Flor hace como un año y algo que ya no salgo mas, me rompía tanto las pelotas… igual ahora estoy muchísimo mejor créeme- bum, me cagaba las expectativas
- y bueno, yo también estoy sin novia así que en Rosario debes tener alguna que otra amiga me imagino, para tu primo seguro tiene que haber algo – le dije y se rió
- hay, hay, tranquilo que hay, pero frena el alboroto un poco – me dijo y me quede en el molde.
Le había pasado de todo, algunas cosas sabia y otras no, así que lo escuche como se ponía al día sacando unas cervezas cada tanto, sin darnos cuenta eran las 20.30 hs y nos habíamos bajado unas cinco cervezas. El timbre sonó, habían llegado los vagos.

Las amaneradas formas de los tres tipos que aparecieron en la puerta me hicieron volcar un poco de cerveza, el impacto visual del cual no estaba preparado me hizo lucir una evidente cara de asombro, Víctor me miraba y se reía y yo no sabia si era una broma o pasaba de verdad. Se auto presentaron enseguida.
- hola vos sos el primo de Víctor, yo soy Pedro – le tendí la mano, pero me dio un beso, Pedro parecía el mas cara dura y amanerado de los tres.
- Ay, para Pedro, Cuando no ella… no se contiene este, yo soy Julio y no le hagas caso a estas estupidas – me había equivocado, este parecía ser el mas amanerado de los tres.
- Y el es Rodrigo – me dijo mi primo, con referencia al restante. Supuse a esta altura que Rodrigo era con quien Víctor tenia alguna especie de vinculo. Rodrigo me saludo muy bien, parecía contenerse mas, solamente un “Hola” y ya esta.
la noche se iba poniendo rara al menos para mi, no sabia que estaba bien y que estaba mal dado que mi sorpresa era grande para con mi primo y que todavía no había tenido la oportunidad de charlar al respecto. Las bromas que hacían causaban gracia pero había alguna que no podía evitar pensar que eran para mi, a todo esto ya había tomado muchísimo y no me importaba sinceramente.
- que les parece si salimos – dijo Víctor – mi primo se queda hasta el domingo solamente y quiere conocer algunas chicas.
- Y que tienen de malo los chicos? – dijo Julio – aparte Rosario esta lleno de histéricas.
A esta altura ya la cabeza me daba vueltas, había tomado muchísimo y sumado al cansancio el resultado era un pedo bárbaro, opte por no tomar mas y respire aliviado el hecho de que hayan decidido quedarse, yo no daba mas así que le dije a mi primo que me quería acostar, salude a todos, y me fui a dormir en una de los dos dormitorios que tenia, eran como las 00.30 hs, apenas me acosté quede dormido.

Soñaba que me estaban chupando la pija extraordinariamente, yo ,durísimo, disfrutaba la lengua juguetona tendido boca arriba, volando en pasión, era tan real el sueño que no pude evitar abrir los ojos solo para ver a Pedro comiéndose mi verga extasiado, del otro lado de la cama Julio me acariciaba el pecho y buscaba meterse mi chota a la boca mientras me acariciaba los huevos, veía como se peleaban como dos nenas por su chupetín, ellos ni se habían dado cuenta que había abierto los ojos. Deje que esa incursión nocturna siguiera, era demasiado lo que disfrutaba. Yo podía oír su conversación
- que rica verga que tiene, como me gusta, toma cométela un rato vos – la voz de Pedro
- mmmmm, pellizcalo para que se despierte, hace algo, quiero que me cojan, metete los huevos a la boca, arranquémosle la choca con la boca – decía Julio y se rieron cautelosamente
- mira vos el primito que tenia Víctor, no puedo mas yo quiero que me abra el orto este hijo de puta tiene una chota tan dura- dijo Julio y la conversación me hizo calentar mas, deje de fingir.
- No, chupamela otro rato que me encantan sus boquitas, que peteras hábiles que son – le dije y vi como se sorprendían, Pedro dejo de chupar, pero Julio estaba prendido, como le gustaba la poronga a ese vago
- Ayy papito me asustaste, nos queres coger a las dos con tu verga? Como te gustaba hacerte el dormido, vas a ver como te la chupo ahora que se que estas despierto – Pedro dijo esto y enseguida se tumbo como desesperado, con mi verga en la boca se saco el pantalón de Jean que tenia y me llevo la mano para que juegue con su tanga perdida en una cola paradita , hermosa
- Poneme saliva en la cola mi vida, siiisisi, así, juga en mi agujerito, papito que ganas de cogerme que tenes – decía Pedro y era verdad, su cola era maravillosa y mis dedos se lo hacian saber
Julio no terminaba de desvestirse, pero una vez hecho, puso su cola sobre mi cara, la curva de su cola pasaba caliente por mi lengua, el hacia evidente su satisfacción moviéndose de manera rítmica y con un contoneo que endurecía hasta el alma
- mi amor, como me gusta esa lengua en mi hoyito, pasame por las nalgas bebe así, ay, como la quiero comer a esa verga, correte puta! – le dijo a Pedro que dividía su tiempo entre mis bolas y mi chota
- que calientes que nos tenes, que culito queres romper primero?- decía Pedro, yo estaba tan caliente que no me importaba nada
- sentate en mi verga vos Pedro – le dije - y vos – esta vez hablándole a Julio – dejame esta colita en la cara que recién empiezo.
- Ayyy que caliente que me dejas guacho, que te gusta que te haga este putito, decime, que lengüita que tenes justo lo que quería mi culo – decía todo junto, que halagué su cola era lo mejor para Julio
- Uuffff, que rico, abrime la cola con la mano, cogeme con toda – decía Pedro sin darse cuenta que era el que se estaba sentando con mas y mas violencia sobre mi verga. Gemía en máximo volumen sola para tapar el golpeteo de sus nalgas y me pelvis.
El tiempo es relativo en ese caso, ni se cuanto estuvimos, pero fue un largo rato
- ahora te quiero coger a vos – le dije a Julio – a ver si me moves esa cola en la verga como lo haces en la lengua
- sii papito, ahora vas a ver – dijo Julio poniéndose en cuatro – entrame con todo bebe, uyyyuufff, ahhhh que bueno ayyya, cojéeme fuerte, fuerte te quiero
Y puse toda la calentura que tenia en el orto de Julio, Pedro lamía mis huevos que iban y venían sobre la cola de Julio que se mostraba putisima “ ayyy, ayyyy,” decía, alternando las frecuencias y el volumen.
- se van a tragar la leche putitas? – les dije – y con gesto afirmativo me tumbaron boca arriba en la cama
Me pajeaban y chupaban, yo quería seguir pero el chorro era incontrolable, acabe en esas boca con una vehemencia épica, y ni una gota quedo en la cama, la sed de leche que tenían era interminable
Después de chuparme por diversión unos minutos más, me dijeron
- que buena cogida papi, hasta el domingo a la noche queda mucho todavía y ni siquiera esta noche se termina.
Agarre la sabana fuertemente, como presagiando lo que iba a venir